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Argentina: La lucha continúa

Todo lo que aún falta en salud

Jorge Yabkowski
 Presidente Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la Argentina

Hay obvias diferencias
entre el sloganizado "estado de salud ideal" comunicado a la opinión pública por el Ministro de Salud de la Nación en Clarín del 2 de enero, con el estado sanitario real de nuestro país.
La acción humana en salud puede aportar una amplia gama de intervenciones y el acceso de la población depende de la situación social y del tipo de servicios de salud con que cuenta una sociedad en cada circunstancia histórica. En Argentina hay enfermedades de sencillo tratamiento que son actualmente las principales causantes de muertes en las poblaciones más marginales, creando una enorme brecha de inequidad. Desnutrición, tuberculosis, chagas, infecciones, alta mortalidad infantil son enfermedades sociales ligadas a la pobreza e indigencia.
La polémica que el Ministro soslaya es si los Servicios de salud en nuestro país son universales, equitativos e integrales? ¿No será que hay una evidente segmentación con servicios sanitarios para ricos y otro para pobres? ¿Todos los ciudadanos tienen iguales posibilidades de acceso al derecho a la salud? Desde ya que No. Más de 3 millones de argentinos pagan más de 500 dólares anuales para acceder a Seguros Privados. Unos 12 millones de habitantes y tres millones de jubilados tienen coberturas en la Seguridad Social que van de lo óptimo a lo pésimo. Pero 17 millones (pobres e indigentes) cuentan con 1500 hospitales y 6000 unidades sanitarias, en los que el Estado invierte sólo el 2,5 % del PBI. De los 27.000 millones de pesos que se gastan en salud en Argentina la mitad lo pone la población de su bolsillo y el Estado solo aporta la cuarta parte.
El Plan Federal y el Plan Remediar ¿han mejorado esta estructura regresiva? El gasto de bolsillo de la población en medicamentos ¿ha disminuido con la aplicación de la prescripción por nombre genérico? De ninguna manera. Los precios de los medicamentos siguen aumentando y los laboratorios farmacéuticos incrementaron su facturación de 4 a 6 mil millones de pesos desde el 2002. El Remediar financiado con créditos de organismos internacionales que aumentan la deuda externa, solo llega a 1.800.000 personas y no a 15 millones, como afirma el Ministro. Cada botiquín del programa cuesta 240 dólares pero la Multisectorial por la Producción Pública de Medicamentos afirma que los laboratorios públicos podrían producirlos por menos de la mitad. ¿Por qué no producir públicamente? Los acuerdos con el BID – Banco Mundial no lo permiten.
El próximo 7 de abril la OMS dedicará el Día Mundial de la Salud a un factor clave: el trabajador de la salud, pero en Argentina nadie sabe cuantos profesionales trabajan hoy en el sector público. Nuestra estimación es que serían alrededor de 70.000, el 40% bajo formas precarias de contratación, tal como lo es el Plan de Médicos Comunitarios. Incorporando 30.000 profesionales se duplicaría rápidamente la oferta de Servicios gratuitos haciendo funcionar los hospitales y Centros de salud por la tarde. La masa salarial necesaria rondaría los 300 millones de dólares anuales, la trigésima parte de lo recientemente pagado al FMI.
Los profesionales sostenemos que debe comenzar el debate sobre la inversión en salud y que el Estado debe llevar su gasto del 2,5% al 5% del PBI. Tenemos que pensar como superar la fragmentación construyendo un verdadero Sistema Nacional de Salud, para ello los servicios públicos universales de calidad son una herramienta clave en la construcción de ciudadanía con inclusión, justicia social e identidad nacional. Un dilema se instala: fortalecer el sistema público de salud vía un shock distributivo de fondos o subsidiar al subsector privado. ¿En qué rumbo va nuestro ministro? Para que la salud pública sea una cuestión de Estado hace falta que la sociedad se implique en este debate para que aparezca, entonces, una decisión política hasta ahora ausente.

Lo tildado en color rojo fue lo que censuro el Diario Clarín de la nota del Dr. Jorge Yabkowski

Fuente: lafogata.org