Argentina: La lucha continúa
|
Correpi - boletín informativo
Número 407 - 24 de Diciembre de 2006
SUMARIO
1- La mañana de los bastones cortos
2- A 5 Años del Argentinazo
3- Represión en Puente Alsina
4- Represión en Jujuy
5- Represión en Rawson
6- Conclusión
7- Nueva purga bonaerense
LA MAÑANA DE LOS BASTONES CORTOS
Como lo calificara el periodista Daniel Ezcurra, nuevamente la policía avasalló
a la Universidad de Buenos Aires. No de la mano dura de la dictadura de Onganía
sino de la mano dura del "gobierno popular". Después de 8 meses de acefalía
había que instalar un rector a la medida del peronismo.
Para ello, usando el congreso y a la Federal, el gobierno armó un dispositivo
donde los asambleístas del gobierno entraban como por un "tubo" desde el subte
A, a los consejeros del estudiantado se les impedía el acceso, en tanto la FUBA
era corrida con hidrantes y palos. Esta vez al gobierno de los derechos humanos
no le bastó la "tercerización de la represión" como el 2 de mayo con la patota
de Anró y del sindicalismo. Debió recurrir a su último eslabón: 500 canas de la
PFA para impedir siquiera discutir la reforma de los estatutos universitarios.
La entronización del rector peronista Hallú, cuya primera intervención para fue
amenazar y macartear a los estudiantes es producto de la represión organizada
por Aníbal Fernández. Siete detenidos que un día después recuperaron su
libertad, pero que engrosan las listas de perseguidos por razones políticas del
gobierno de Kirchner.
No se ha escuchado lo que opinan Hebe Pastor de Bonafini o Estela Barnes de
Carlotto, o tantos otros cuyo único horizonte a la hora de hablar de los
derechos humanos se remonta treinta años atrás.
A CINCO AÑOS DEL ARGENTINAZO
Como todos los años, CORREPI participó de la marcha de Congreso a Plaza de Mayo
en el quinto aniversario de las jornadas insurreccionales que echaron al
gobierno encabezado por Fernando De la Rua el 19 y 20 de diciembre de 2001. Fue
notable, pese a la masividad de la marcha, la cantidad de provocaciones por
parte del aparato estatal, empezando con la franca represión con gases durante
el escrache en el Departamento Central de Policía al comisario Ernesto S. Weber,
hijo del asesino de Rodolfo Walsh y responsable él de tres de las muertes del 20
de deiciembre, entre ellos nuestro compañero Carlos "Petete" Almirón.
Más tarde, cuando nos concentrábamos en Rivadavia y Entre Ríos, nos sacaron
fotografías -haciendo ver claramente que lo hacían- desde un automóvil Falcon de
color azul, dominio WER 286. No es la primera vez que vemos ese Falcon azul. El
auto, con la misma descripción y el mismo dominio, fue uno de los que intervino,
el 25 de febrero de 2003, en la represión durante el desalojo del Padelai,
y está incluido en el listado de vehículos policiales en la denuncia que CORREPI
y un conjunto de organizaciones formulamos judicialmente por aquellos
hechos. Seguidamente, la policía abrió el tránsito mientras la columna se
desplazaba, y con su venia un ofuscado taxista casi atropella a un compañero de
esta organización.
Así como participamos de la marcha, no suscribimos el documento que surgió del
espacio que se denominó Autoconvocados por el 20 de Diciembre en conjunto con el
Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, pues a nuestro criterio secundarizaba, al
omitirlos en las consignas centrales, la reivindicación y homenaje a los 37
asesinados por las fuerzas de seguridad del estado el 20 de diciembre de 2001,
entre ellos nuestro compañero Petete, del mismo modo que apenas mencionaba, como
un tema equivalente a la polución ambiental, la represión cotidiana que nos está
costando un pibe muerto día por medio.
Sostenemos que de nada sirve exigir al gobierno de Kirchner la aparición con
vida de Jorge Julio López sin denunciar la política de hambre y represión que
enfrentamos a diario, sin señalar que el tan mentado aparato represivo son las
fuerzas estatales dirigidas por Kirchner, sus ministros y gobernadores, que
hacen su trabajo como se les ordena. Ante la represión sólo hay una respuesta
posible desde los trabajadores y el pueblo: organización y lucha, sin
claudicaciones ni concertaciones. Las víctimas del argentinazo
murieron confrontando al gobierno y fueron asesinadas por las balas del estado,
el mismo que hoy administra Kirchner.
REPRESIÓN EN EL PUENTE ALSINA
En la tarde del martes un grupo de cartoneros decidió cortar el tránsito en el
Puente Alsina en reclamo por el secuestro de tres camiones durante un operativo
de control. El incidente se inició a raíz de la decisión del gobierno
"progresista" del intendente Telerman que tiende a impedir "la circulación de
camiones y unidades en condiciones irregulares" (podrían empezar con las líneas
de colectivos por ejemplo). Para ello, cuentan con la inestimable cooperación de
la Federal.
Rápidamente la Policía Federal reprimió con gases lacrimógenos y despejó el
puente que une la ciudad de Buenos Aires con Avellaneda. Para el "afrancesado"
jefe porteño, lo importante no fue la represión contra los cartoneros sino que
"hubo que lamentar heridos entre el personal policial"
REPRESIÓN EN JUJUY
El gobierno protokirchnerista de Jujuy mandó a reprimir a integrantes de la
Asociación de Trabajadores Desocupados (ATD) de Alto Comedero que se congregaron
en las puertas de un hipermercado en reclamo de bolsones de comida para pasar la
Navidad. Mientras los desocupados esperaban la respuesta de los dueños del
supermercado, Fellner envió la policía que con balas de goma y gases reprimió a
los hambreados.
El saldo de la incursión del GEOP -Grupo Especial de Operaciones
Policiales- fueron ocho niños y quince adultos heridos de bala y golpes de palos
en el rostro además de cinco niños intoxicados por los gases arrojados por la
cana. Como siempre, gobiernos tienen una clara opción, no es precisamente por
los pobres, sino por los empresarios de supermercados.
REPRESIÓN EN RAWSON
Los trabajadores de la planta pesquera Flota Amarilla S.A. de la capital
chubutense venían desarrollando un plan de lucha para que les pagaran salarios
adeudados. Ya habían escrachado a los gerentes de las empresa en sus casas y se
aprestaban a hacer un piquete en la doble trocha que une Rawson y Playa Unión.
Como la orden es que no se puede permitir la protesta, otro gobernador
kircherista, Mario Das Neves, mandó la cana. La policía antimotines reprimió a
los manifestantes, como siempre, con balazos de goma y gases. Más de 20 obreros
heridos y 4 detenidos. Aunque parece que del lado policial tampoco se la
llevaron de arriba, ya que 7 "agentes del orden" terminaron en el hospital.
Entre los detenidos estuvo Fabián Molina, secretario general del Sindicato de la
Industria de la Alimentación, que afirmó: Seguiremos reclamando hasta que
algún día todo cambie en esta política miserable para los trabajadores, que
tienen que seguir soportando componendas entre empresarios y funcionarios de
turno", y siguió: "Mientras los trabajadores se reunían frente a la
comisaría para obtener la liberación de los detenidos, uno fue clarísimo frente
a la prensa refiriéndose al jefe policial: "Al Comisario se le hizo el sueño del
pibe: reprimir y reprimir, es de gatillo fácil".
CONCLUSIÓN
En esta semana, represiones en la ciudad de Buenos Aries contra estudiantes
y en el límite con la Provincia contra cartoneros. Represión en el Norte contra
desocupados y contra trabajadores en la Patagonia.
Represiones en todos lados. ¿Se acabó el consenso impuesto por el gobierno
nacional? ¿Ya no alcanzan las patotas K para parar la protesta? Como siempre, a
mayor conflictividad, la única respuesta es la represiva.
PURGA EN LA BONAERENSE
Otra vez, los titulares anunciaron "Fuerte Purga en la Bonaerense". La noticia
es breve: el ministro de seguridad Arslanián despidió 116 policías, entre ellos
los de la DDI de San Martín que intentaron robarse 47.000 pesos del rescate de
Ianonne, aprovechando que la familia les dio los billetes para fotocopiarlos. La
lista incluye policías involucrados en delitos comunes, como aquellos que
soplete en mano se quisieron robar un cajero automático de un supermercado, y
otros que completan el "menú" habitual de criminalidad policial.
Antes de que alguno salga a festejar que con esta purga "se desmantela el
aparato represivo", hagamos algunas aclaraciones. En primer lugar, los policías
en cuestión no han sido exonerados, sino declarados prescindibles, lo que
significa que pueden volver a las filas policiales ni bien éste u otro ministro
lo decida. En segundo lugar, con estas 116 nuevas prescindibilidades, suman 1049
las que se hicieron públicas en el curso de los pasados 30 meses, sin contar los
gerontes como Somohano, exonerados estando retirados, del acto mediático
posterior a la desparición de Jorge Julio López. Arslanián está despidiendo sus
"nuevos" policías de la Buenos Aires 2 a razón de 32 por mes. O sea, uno y un
piquito por día.
En el mismo lapso, en la provincia de Buenos Aires, como en el resto del país,
crece la represión en todas sus modalidades, y especialmente la de carácter
"preventivo", disciplinador, sobre los sectores más vulnerables de la sociedad.
No nos cansamos de repetir que no hay purga que pare el gatillo fácil, la
tortura, las razzias ni las detenciones arbitrarias. Es curioso que en este
último caso se explica que entre los "purgados" hay algunos recién reclutados
que no "comprendían los objetivos de la institución". ¿Alguno que se negó a
reconocer en todo joven pobre un sospechoso exterminable?.
CORREPI
Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional
Ciudad de Buenos Aires • Argentina