El periodista agredido radico la denuncia ante la brigada
"El discurso de Mar�n fue violento contra el periodismo"
El cronista sufri� un corte debajo de un ojo producto de una trompada. Ocurri� el s�bado mientras cubr�a el Congreso del PJ.
Esta ma�ana realizar� una nueva presentaci�n ante la fiscal�a de turno.

Juan Pablo Gavazza, periodista de El Diario y director del mensuario El Fisg�n, se present� ayer a la ma�ana ante la Brigada de Investigaciones de Santa Rosa para radicar una denuncia por la agresi�n que sufri� el s�bado mientras realizaba la cobertura period�stica del Congreso Provincial del Partido Justicialista en la localidad de Victorica. El cronista no quiere que el episodio termine en una lluvia de gestos de solidaridad sino que la Justicia identifique y castigue al agresor.
Hasta anoche no hab�a sido localizado. Pero fuentes del partido deslizaron que ser�a de la zona norte de la ciudad.
"La denuncia qued� asentada como lesiones", dijo el periodista. "Ma�ana (por hoy) voy a ir a la fiscal�a para aportar m�s datos y que sea m�s �gil la investigaci�n", dijo. Gavazza recibi� a un equipo de este diario en la redacci�n del matutino para el que trabaja.
La agresi�n se produjo a las 19.30 del s�bado. Hac�a minutos que el presidente del PJ, Rub�n Mar�n, hab�a pronunciado el discurso de cierre del Congreso partidario que sesion� en el gimnasio del Club Cochic�. "Segu� todo el acto desde el fondo del sal�n, entre la gente. Cuando termin� de hablar Mar�n me fui hacia el escenario. Habr�a unas sesenta personas esperando que bajaran Mar�n y (Carlos) Verna y en ese momento vino un grupo de personas detr�s de m�, me dijeron que eran cinco o seis", dijo.
"La trompada fue desde atr�s -continu�-, de callados, ninguno me insult�, no hubo discusiones. Me ca� y me iban a pegar una patada en el piso, pero 'Coco' (Walter Brandimarte, el reportero gr�fico que lo acompa�aba) se meti� y sac� al agresor, por eso no pudo sacar fotos. Entonces el grupo se mezcl� entre los sesenta que estaban saludando y se fue por una puerta lateral".
Morrudo.
De acuerdo a la descripci�n de los testigos, el autor del ataque contra el periodista tendr�a unos 25 a�os, 1,80 metros de altura, morrudo, vest�a un jean y una remera musculosa de color verde, y estaba tatuado.
Gavazza estuvo diez minutos mareado. S�lo recuerda que se acerc� un m�dico que habr�a estado entre los congresales y que lo atendi� junto a algunas se�oras. Luego varios dirigentes justicialistas pasaron a verlo y le preguntaron qu� hab�a sucedido.
"En el momento del hecho, les comuniqu� lo ocurrido a los polic�as que estaban afuera del gimnasio del congreso (no hab�a uniformados en el interior), les describ�, de acuerdo a lo que vio el fot�grafo, la vestimenta y el aspecto f�sico del tipo (sic)", afirm�. Gavazza cree que quien lo agredi� es una persona de esta capital pero no tiene certeza plena porque no lo vio. Pero est� seguro de que los 11 colectivos y las 23 combis que viajaron desde esta ciudad a Victorica ten�an los nombres de todos sus pasajeros. La polic�a, sin embargo, no habr�a detenido a los micros para buscar al agresor.
Mar�n.
Los ataques contra el periodismo son recurrentes en los discursos del presidente del peronismo pampeano. El �ltimo que hab�a pronunciado hab�a tenido como contexto el festejo por el D�a de la Lealtad Peronista, el 17 de octubre, y durante la �ltima entrevista que este diario le realiz� en el aeropuerto local, Mar�n termin� increpando al cronista de LA ARENA.
"Hace 15 a�os que cubro los congresos peronistas y siempre escucho a Mar�n hablar contra los periodistas, pero el discurso de ayer (por el s�bado) fue el m�s virulento -dijo Gavazza-. El congreso no hab�a tenido hechos de violencia hasta su discurso. El discurso de Mar�n fue violento contra el periodismo, fuera de contexto, desubicado, destemplado... Lanz� improperios, calificativos, y en la �ltima frase acus� a las revistas de Santa Rosa de ser una infamia y unos caras duras. Tambi�n hizo referencias a LA ARENA, a El Diario, y a quien fuera, porque todo el discurso hizo eje en atacar al periodismo".
-�La agresi�n estuvo vinculada a esa arenga?
-No la puedo atar directamente, pero tengo en claro que los dirigentes dan permiso para estas cosas, dejan la puerta abierta, incitan o instigan. Incluso, el congreso estaba lleno de gente a la que ni le interesaba el debate. Hab�a barras de los barrios que tomaban cerveza en bidones de cinco litros, que iban a recargar, y la compraban con la misma plata que les dieron los congresales. Son barras. Antes eran militantes, pero de militantes bajaron a punteros, y ahora ni eso son, no s� qu� mote ponerles, es una lacra, una especie de lumpenaje que viven del clientelaje y el delito. No es novedad. Nosotros hemos denunciado en la revista que hubo actos del peronismo en los que participaron tipos pr�fugos de la Justicia, personas a las que supuestamente la Justicia est� buscando.