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Regresa López Obrador a sus oficinas del
gobierno capitalino
Infodemex
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, instó
al presidente Vicente Fox Quesada a que escuche las voces de la gente que se
expresó en contra de un retroceso en los recientes avances democráticos del
país, en contra de los pleitos de los políticos, gente que exige vivir en
armonía y pide que se resuelvan sus problemas fundamentales: 'Lo que tenemos que
hacer todos los actores políticos es buscar la conciliación', señaló.
El mandatario capitalino se declaró 'moralmente muy fortalecido', al retomar
ayer sus funciones al frente de la administración pública local, tras 17 días de
ausencia y, consecuente con su discurso conciliador del domingo en el Zócalo,
tras participar en la marcha del silencio, dijo que está dispuesto a dialogar
con el gobierno federal y las dirigencias de los partidos Acción Nacional (PAN)
y Revolucionario Institucional (PRI), pero aclaró que de su caso 'no hay nada
que negociar', pues son ellos quienes están impulsando su inhabilitación
política y por lo tanto quienes tienen que rectificar.
'En la política es bien visto el tener la capacidad para rectificar; en política
no se puede caer en la autocomplacencia ni en el regodeo, en aferrarse a las
cosas a pesar de que la realidad está mostrando lo contrario', señaló.
Unas 400 personas esperaron ayer desde antes de las seis de la mañana la llegada
del gobernante de la ciudad de México fuera del edificio del Antiguo Palacio del
Ayuntamiento, donde se apostaron su secretario particular, Alejandro Esquer; el
secretario de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez; el subsecretario Jesús
Zambrano, así como la coordinadora de Atención Ciudadana y Gestión Social,
Leticia Ramírez, entre otros.
Dentro del edificio, al pie de las escalinatas hicieron lo propio casi un
centenar de funcionarios del gabinete; desde esa hora comenzaron a escucharse
consignas de apoyo al jefe de Gobierno capitalino hasta su arribo, 18 minutos
después. Cruzada la puerta principal, sus colaboradores le aplaudieron, lo
abrazaron los más allegados y le dieron palmadas en la espalda.