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Latinoamérica

Caso Anderson: Testigo admitió ser miembro de los paramilitares colombianos

El Universal

Giovani José Vásquez De Armas, el testigo clave del Ministerio Público para fundamentar la imputación de Patricia Poleo, Nelson Mezerhane, el general (r) Eugenio Añez Núñez y Salvador Romaní como presuntos autores intelectuales del asesinato de Danilo Anderson, admitió haber formado parte de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), al punto de que llegó a ser jefe de logística de dicha organización paramilitar, así como también dio cuenta de su participación en dos de las supuestas reuniones donde se planificó el crimen y, más precisamente, que el 15 de marzo de 2004 recogió en Panamá y trasladó hacia Venezuela los 12 kilogramos de C-4 que se utilizaron para detonar el vehículo que conducía el fiscal.
El testimonio de Vásquez De Armas fue recabado a las 10:30 am del 29 de agosto de 2005, en el Tribunal 19 de Control, a cargo de Gúmer Quintana. El fiscal Gilberto Landaeta, a través de la solicitud N° 5397, fue el promotor de la polémica prueba anticipada. La información está registrada entre los folios 66 a 71 de la solicitud de detención de Poleo, Mezerhane, Añez Núñez y Romaní.
El testigo aparece identificado de la siguiente forma: Giovani José Vásquez De Armas, C.I. N° 84.086.591. Profesión: médico, actualmente inactivo (pero se acota que prestó servicios en la Fundación Magdalena, la cual era controlada por las AUC). Domicilio: calle 138 con avenida 53, edificio Diana, piso 5, apartamento 503, Bogotá.

Darién, 2003

Según el relato de Vásquez De Armas, entre el 4 y el 6 de septiembre de 2003 se realizó una reunión en Darién, Panamá, donde estuvieron presentes Patricia Poleo (como representante del Movimiento Libertad), Salvador Romaní, Rolando Guevara, Otoniel Guevara, Pedro Lander, Orlando Urdaneta, un jefe del FBI de apellido Pesquera, un agente de la CIA de apellido Morrinson, el capitán Luis García (como representante de la organización anticastrista Comando F4) e Israel Pincheski (como representante de los banqueros).
"Allí se discutió el plan apoyado por el FBI y la CIA _continuó Vásquez De Armas_ y algunos presidentes de medios de comunicación para sacar a Chávez del Gobierno. En esa misma reunión se dice que el objetivo final era matar al presidente Chávez, al fiscal general y a un connotado líder opositor de apellido Mendoza".

Maracaibo, 2004

El testigo del Ministerio Público dijo que hubo una segunda reunión en Miami para planificar los supuestos atentados, a la cual él no asistió.
Continuó informando sobre una tercera reunión que se habría llevado a cabo el 3 o el 4 de marzo de 2004, en un apartamento propiedad de las AUC, ubicado en el sector Milagro Norte de Maracaibo. Dijo no recordar el nombre del edificio, pero indicó que estaba al lado de la sede de Pequiven.
"La Mona _apodo de la tesorera de las AUC_ se encargó de recogerme en el puente del Lago. Posteriormente se unió un grupo de personas integrado por dos generales, cuyos portanombres decían Escalante y Colmenares. A este último, el comandante Jorge 40 _alias de Rodrigo Tovar, dirigente de las AUC_ lo llamó por su nombre: Eugenio Añez. Este me dijo que no lo llamara por su nombre por motivos de seguridad.
También se unió a esta reunión Juan Bautista y Johan Peña. No estaba Urdaneta, pero sí un abogado que no sé el nombre. Y por los banqueros estaba Pincheski y otro de nombre Juan Carlos Sánchez".
"En esta reunión _prosiguió Vásquez De Armas_ hay un cambio drástico. Se decidió, en definitiva, cambiar el objetivo y escoger como víctima a Danilo Anderson. Y deciden todo lo relacionado con el atentado".

Apoyo en Colombia

Seguramente sobre la base de lo informado por Vásquez De Armas, Isaías Rodríguez había adelantado la participación de individualidades del FBI y la CIA en la planificación del asesinato de Anderson. Ahora se sabe que el relato del supuesto paramilitar involucra a otros cuerpos de seguridad internacionales.
"Para trasladar el C-4 (por el cual se habría pagado 6 millones de dólares al mayor Flores Figuera, comandante del Batallón Cartagena, con sede en Riohacha, precisó el informante) recibí órdenes del comandante Jorge 40.
Me comuniqué con el director del DAS, de apellido Noguera, y le dije que tenía que entregar el explosivo en El Moján, estado Zulia. Allí lo recogió una camioneta de Marshall Security, una compañía de Salvador Romaní, quien lo llevó a La Guaira y lo entregó a un abogado", dijo sin mayor precisión.