Latinoam�rica
|
![]() |
La Iglesia de San Francisco en Bogot�: un punto de confluencia de las resistencias
Peri�dico El Turbi�n
En medio de la lluvia, la expectativa era el sentimiento reinante entre los
ocupantes de la Iglesia de San Francisco, ubicado en la Carrera S�ptima con
Avenida Jim�nez de Bogot�. Esta tarde, luego de 5 d�as de toma, la espera de los
centenares de personas que ocupan este monumento religioso y de las personas que
han venido acompa�ando este proceso era evidente en momentos en los que la
comisi�n negociadora de los educadores y pobladores afrocolombianos se reun�a
con la ministra de Educaci�n, Cecilia Mar�a V�lez, y los comerciantes informales
del Mercado de las Pulgas exig�an respuesta a la reuni�n solicitada con la
alcald�a.
La cuesti�n afrocolombiana:
El movimiento, iniciado el pasado jueves por educadores y delegados de diversas
organizaciones de pobladores afrocolombianos venidos especialmente de los
departamentos del Pac�fico colombiano, se ha planteado como una lucha por tres
reivindicaciones fundamentales para esta poblaci�n que, con el paso de los a�os
y de las injusticias, se ha convertido en una de las m�s marginadas y
vulnerables del pa�s.
En primer lugar, los educadores afrocolombianos se han planteado la lucha contra
la reforma educativa que, por v�a de concursos que desconocen la etnoeducaci�n y
el trabajo de centenares de docentes, lesiona gravemente la identidad y la
construcci�n de las comunidades, planteando, el d�a de hoy, al Ministerio de
Educaci�n la necesidad de impulsar una pol�tica diferente en cuanto a la mejora
de la calidad educativa de las negritudes colombianas y logrando que esta
entidad aplazara la aplicaci�n de estas medidas por los pr�ximos 4 meses, hasta
su revisi�n por la comisi�n pedag�gica.
En segundo lugar se encuentra la problem�tica relacionada con el pol�mico censo
nacional que el DANE realiza actualmente. Las comunidades negras plantean que
este mecanismo es inexacto e incompleto y por ello proponen que los resultados
del mismo expresen claramente los datos que permitan cuantificar la poblaci�n
afrocolombiana del pa�s, su condici�n socioecon�mica y sus ingresos exactos, con
el fin de definir las condiciones exactas en las que esta poblaci�n est�
subsistiendo y las diferencias que sufre con respecto a otras capas de la
poblaci�n, especialmente en temas como el derecho a la tierra, los salarios y
condiciones de vida dignas.
El tema m�s complicado de la agenda, por �ltimo, est� situado en el problema de
la devoluci�n de los territorios colectivos, como Jiguamiand� y Curvarad� (http://colombia.indymedia.org/news/2005/11/33185.php),
que han sido usurpados violentamente a las comunidades y titulados, mediante
todo tipo de marrullas legales e ilegales, a grandes terratenientes que los han
destinado, especialmente, a la siembra agroindustrial de la palma aceitera con
las gigantescas ganancias que la caracterizan gracias al negocio del biodiesel (http://colombia.indymedia.org/news/2005/10/32917.php).
Ante esta flagrante violaci�n a sus derechos, evidentemente cometida a la luz de
la mal llamada ley de Justicia y Paz, las comunidades exigen el respeto de sus
territorios colectivos, el cese de la violencia militar y paramilitar, que ya ha
cobrado numerosas v�ctimas, la devoluci�n de sus tierras y el aplazamiento de la
aprobaci�n del proyecto de ley forestal que cursa tr�mite en el Congreso hasta
no sea revisado de acuerdo a las necesidades de estas comunidades.
Para el d�a de ma�ana se espera una reuni�n con delegados del Instituto
Colombiano de Desarrollo Rural (Incoder), el Ministerio del Medio Ambiente y
Desarrollo Social y el Ministerio del Interior y de Justicia, en la que la
comisi�n negociadora de los afrocolombianos intentar� concretar salidas y llegar
a un acuerdo con el gobierno frente a estos puntos para poder dar por concluida
la toma pac�fica.
"�Acaso es un crimen trabajar?":
De otra parte, al menos un centenar de vendedores estacionarios del Mercado de
las Pulgas del Parque de los Periodistas de Bogot�, agrupados en la organizaci�n
Asopulgueros, y de ex contratistas del programa Misi�n Bogot� decidieron iniciar
su propia protesta y participar de la toma pac�fica para exigir de la
Administraci�n Distrital soluciones concretas a las problem�ticas que est�n
atravesando actualmente.
El conflicto de los comerciantes informales se inicia con la pol�tica de
supuesta recuperaci�n del espacio p�blico que han llevado a cabo las �ltimas
alcald�as del Distrito y con la pol�tica de reubicaci�n que ha trazado el Fondo
de Ventas Populares, en cabeza de In�s Elvira Rold�n, la cual s�lo ha ofrecido
soluciones insulsas a los comerciantes mientras, seg�n denuncian los mismos, se
malgasta el dinero de dicho fondo en "remodelar oficinas y financiar �elefantes
blancos� en los centros comerciales en los que dicen que nos van a reubicar:
locales por donde nunca pasa nadie y no vendemos lo que necesitamos para
llevarle de comer a nuestras familias".
El Fondo ha empleado presupuestos obtenidos de diversas fuentes, entre ellas las
donaciones internacionales, para financiar programas como Misi�n Bogot�, donde
se ofrecen trabajos en labores c�vicas con bajos ingresos y contratos
temporales, en los cuales se han empleado centenares de ex ambulantes, para
plantear programas de capacitaci�n y para impulsar una pol�tica de reubicaci�n
de estos trabajadores en centros locales subsidiados por el Distrito.
Dicha pol�tica es fuertemente criticada por los manifestantes. "Nos plantean
como soluci�n hacer cursos en el SENA donde no nos certifican lo que aprendimos,
donde nos dicen que podemos ser �empresarios de �xito� pero no c�mo podemos
llevarle de comer a nuestros hijos. Nos ofrecen locales por donde nadie entra a
compara nada y nos echan a la polic�a a perseguirnos como criminales en lugar de
ofrecernos alg�n trabajo fijo para sostenernos", asegur� un miembro de
Asopulgueros.
Los comerciantes informales del Mercado de las Pulgas se unieron a la protesta
el d�a de hoy, luego de que otro grupo de ambulantes firmara un acuerdo con el
secretario de Gobierno del Distrito, Juan Manuel Ospina, para establecer un
programa de subsidios y de empleo que solucionase su situaci�n por v�as
diferentes a las policiales, desalojando el templo en la tarde del domingo.
La situaci�n de estos vendedores se torna m�s dram�tica en la medida en que s�lo
pueden ejercer su oficio los domingos y d�as festivos, d�as en los que el
Distrito autoriza la instalaci�n del conocido �pulguero�, dando como resultado
que estas personas deben entrar a la econom�a del �rebusque� como medio de
subsistencia el resto de la semana y enfrentando dram�ticas penalidades
econ�micas por sus bajos ingresos, por la escasez de trabajos que les ofrezcan
estabilidad laboral y por el hecho de que muchos de ellos ya son parte de la
llamada tercera edad.
En una comunicaci�n facilitada a uno de nuestros reporteros, los vendedores de
Asopulgueros y los ex contratistas de Misi�n Bogot� exponen que "pedimos ser
tomados en cuenta: que nos auxilien con una buena ubicaci�n y con trabajo
diario. De esta forma no estar�n violentando nuestros derechos a la igualdad, a
trabajar y a vivir dignamente". Adicionalmente, exigieron del Gobierno Distrital
la implementaci�n de soluciones reales en materia de subsidios para los
vendedores y sus familias, capacitaci�n en �reas que realmente apunten a
solucionar sus problemas econ�micos y en materia de empleo digno y estable.