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Informe de Contra-Contrainteligencia : intervención militar
Poetas Antiimperialistas
El plan de intervención militar a Bolivia con los cascos azules de las NNUU (
las tropas estarían compuestas principalmente por tropas chilenas, marines
norteamericanos, algunos contingentes de brasil, paraguay y argentina), que
comenzó a planificarse desde noviembre del 2003, tal como lo transmite un
"informe de inteligencia de la agencia Stratford global", el 4/11/03,
pretendiendo con ello tomar control político de una de las rebeliones mas
fuertes contra el sistema, ahora tiene fechas muy cercanas para su ejecución.
Informes de inteligencia señalan que el ingreso de las tropas norteamericanas
por la frontera con Paraguay y las chilenas por su frontera con Bolivia, podría
ejecutarse entre noviembre del 2005 y enero del 2006, dependiendo de que se
logren crear las "condiciones" favorables para ello, dentro de Bolivia.
Desde noviembre del 2003 un grueso contingente del ejército de Chile avanzó
desde sus cuarteles, en el norte de Santiago hasta la frontera que tienen con
Bolivia. En principio más de 500 vehículos entre blindados, artillados y
vehículos livianos de apoyo, fueron desplazados hasta el altiplano chileno,
montando campamentos muy cercanos a Pisiga, Todos Santos, Tambo Quemado y
Charaña. Posteriormente, fueron reforzados con artillería pesada, tropas de
élite y ampliando su área de acción hasta las fronteras con el Perú. Hasta marzo
del 2004, el ejército chileno contaba con más de 30.000 hombres en las
inmediaciones de la frontera con Bolivia. Contingente que fue mantenido con
alguna disminución o incremento de tropas hasta septiembre de este año, con un
relevo de tropas cada dos meses, E plan a ejecutarse debía ser muy similar al
ejecutado en Haití (Escenario de entrenamiento para la ejecución del plan
"Bolivia"), donde primero tomaron parte tropas del ejército chileno con marines
norteamericanos. Luego se sumaron, para el relevo, tropas brasileras, argentinas
y paraguayas. En el frente internacional, el operador principal de la inminente
intervención militar en territorio boliviano, EEUU, propició múltiples
reuniones, acuerdos y gestiones diplomáticas y militares. Entre las más
importantes fueron: la reunión de comandantes de Brasil, Argentina y Chile en
diciembre del 2003, para proponer la formación de una fuerza internacional
combinada para ejecutar este plan con el respaldo de las NNUU, plan que en
principio fue rechazado por Argentina y Brasil. Otra acción importante fue la
reunión de Lagos y Kishner, donde se delineo un plan de acción conjunta,
significando el peligro que constituía Bolivia para la paz de la región y el
abastecimiento de gas para el desarrollo de ambas naciones. Corrobora un reporte
de Narco News Bulletin.
También lo fue, la reunión del comandante del Comando Sur del ejército
norteamericano, con los comandantes de Argentina, Brasil y Paraguay, en junio
del 2005, con el aparente motivo de evaluar los avances de la intervención
militar en Haití, donde lograron importantes acuerdos.
La obtención de la inmunidad para el ejército norteamericano en Paraguay, y
posterior convenio para la construcción de bases militares en territorio
paraguayo, que permitió la construcción de una pista de aterrizaje de 3800 mts.
(Longitud necesaria para el aterrizaje de bombarderos), a tan solo 200 km. de la
frontera con Bolivia, fue el logro mas importante en la ejecución del plan (se
termino de construir en agosto del 2005). Actualmente cerca de 10.000 marines se
encuentran en Paraguay listos para entrar en acción.
Solo dos fracasos tuvieron las gestiones diplomáticas y militares de EEUU.
La primera fue la imposibilidad de lograr que Perú se sumara a esta acción, en
razón de que este país considera la intervención del ejército chileno una seria
amenaza para su soberanía. y la segunda, el rechazo de la asamblea de la OEA, en
mayo del 2005, al planteamiento de Bush de intervenir en los países miembros,
cuando la democracia de alguno de ellos este en peligro.
Entre mayo y junio del 2005, estas fuerzas combinadas estuvieron a punto de
entrar en acción. Sin embargo el revés diplomático sufrido en la OEA, y la
inminente intervención armada del ejercito peruano ante el ingreso de tropas
chilenas en territorio boliviano (a fines de mayo/05, mas de 200 tanques
subieron desde Cuzco y Arequipa hasta el fuerte Pomata, a 50 km. de su frontera
con Bolivia), sumado al desenlace final del conflicto social de junio del 2005,
que termino con la subida a la presidencia de Rodríguez Veltzé, frustraron la
ejecución de los planes norteamericanos. Esperaban una confrontación mayor,
tanto en oriente como en occidente.
Para ello, primero armaron a los cooperativistas mineros con fusiles máuser
(antiguos) y luego a la unión juvenil cruceñista (grupos paramilitares
entrenados por militares chilenos de elite) con 12,000 ametralladoras pequeñas
u17 (el armamento provino de chile). La confrontación entre la UJC y campesinos
collas no fue una casualidad, como no lo fue el asesinato de un minero, cuando
cientos de mineros eran transportados hacia Sucre, día antes de la posesión de
Eduardo Rodríguez. Fuentes de inteligencia reportaron que quien disparó contra
el minero fue un Marine norteamericano vestido con el uniforme boliviano.
Otra fuente señalo que en Santa Cruz, al interior de los regimientos, que se
encontraban en estado de alerta, los primeros días de junio/05, se encontraban
camuflados, es decir vestidos con uniforme militar boliviano, marines
norteamericanos, quienes tenían la instrucción de realizar el "trabajo sucio",
una vez que el conflicto fuera incontrolable.
Inmediatamente se diseño un plan contingente, para promover un ablandamiento
dentro del territorio boliviano. La reducción de la entrega de gas natural a las
termoeléctricas, por parte de las empresas productoras, primero y luego la venta
de GLP a Chile, por el poliducto Sica Sica - Arica, y a Paraguay en camiones
cisterna, provocaría condiciones de conflicto social.
En el plano político interno de Bolivia, el tribunal constitucional se encargó
de darle un duro golpe al proceso electoral que se desarrolla a partir de los
acuerdos políticos de julio de este año, al decretar que se modifique la
distribución de escaños en la Cámara de Diputados, tomando en cuenta la
población según el censo del 2001.
Al mismo tiempo, y luego de la subida de Rodríguez Veltzé, la inteligencia
norteamericana, rediseñó los planes a, b y c, para lograr la ejecución del plan
principal.
Plan a: Postergación de las elecciones, con sucesión "constitucional".
Objetivo: lograr la reacción popular.
Plan b: Renuncia de Rodríguez Veltzé, y posterior cierre del Parlamento, lo que
provocaría un vacío de poder. Tomaría el Ejecutivo, un gobierno cívico militar
afín a la embajada estadounidense (se habla de posibles militares que asumirían
la presidencia: el ex - Comandante de Robore, Cnel. Suárez y de el actual
comandante del colegio militar). El objetivo es similar.
Plan c: Desatado el conflicto social, llevarlo a nivel de caos y enfrentamiento
regional, que justifique la intervención militar internacional, con cascos
azules. Los objetivos son: parar las elecciones de diciembre/05, impedir la
realización de la Asamblea Constituyente, impedir que suba a la presidencia Evo
Morales, descabezar los grupos sociales y eliminar a todos sus dirigentes,
(existe una lista que hizo circular la CIA, entre sus agentes, y agentes de la
policía boliviana afines, con 80 nombres, encabezados por Evo Morales, Jaime
Solares, García Linera, Waldo Albarracin, Sacha Llorenti, Roberto de la Cruz,
Oscar Olivera y muchos más), los cuales serian tomados prisioneros para luego
ser eliminados, y tomar control de los hidrocarburos para su exportación a
Chile.
El accionar de la prensa también fue tomado en cuenta. En los últimos dos meses,
informes y opiniones introducidos a través de la prensa local en varios países
latinoamericanos, y de manera persistente, están mostrando por un lado, la
caótica e ingobernable situación que vive Bolivia, sumado al peligro que
significa la toma del poder, vía elecciones, por parte de un ex guerrillero y un
narcotraficante, refiriéndose a Álvaro García Linera y Evo Morales. Por otro
lado, acciones diplomáticas de por medio, también reportan las relaciones
amigables de dos naciones hermanas: Bolivia y Chile, pretendiendo mostrar que ya
no existen razones para temer una invasión chilena a territorio boliviano. Con
todo esto, lograr una opinión favorable de la prensa internacional, el momento
de la intervención militar combinada..