Latinoamérica
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Concluyó en Santiago el coloquio de militares en torno a la
paz y la democracia
Lucía Sepúlveda Ruiz
Rebelión
Redefinir el rol, la formación y la ética de las fuerzas armadas, en un mundo
marcado por el fin de las fronteras y de la nación-Estado y por el auge del
militarismo, ejercido por George Bush y sus aliados en guerras ligadas al
complejo militar industrial, es una tarea asumida por militares asistentes al
Encuentro de Militares por la Paz y la Democracia, realizado entre el 5 y el 8
de octubre, en un hotel ubicado frente al cerro Santa Lucía, en Santiago.
Militares activos y retirados de Europa, Asia y América - incluidos ex presos
políticos de las fuerzas armadas chilenas, argentinas y uruguayas, así como
asesores actuales del Ejecutivo en países como Venezuela y Uruguay, junto a
académicos latinoamericanos– debatieron acerca de la paz y la democracia,. El
encuentro internacional fue convocado por la Escuela de la Paz de Grenoble,
Francia, y la Fundación Charles-Léopold Mayer para el Progreso del Hombre (Suiza
y Francia), junto a la Corporación AYUN y el Centro de Estudios Estratégicos de
la Universidad ARCIS.
También hubo consenso en denunciar el militarismo y la ilegalidad de la guerra
preventiva de Bush, en valorar la democracia y considerar que un gobierno
democrático será siempre mejor que un gobierno militar. En América Latina, se
constató, las democracias no han dado respuesta a los problemas sociales de las
mayorías. El programa desarrollado por los asistentes incluyó un encuentro con
organizaciones de Derechos Humanos en la Municipalidad de San Miguel, visitas a
La Moneda, el ex Senado, el Memorial del Cementerio General, e Isla Negra, y
concluyó con un diálogo con jóvenes participantes en el Festival "Mil Tambores
por la Paz", en Playa Ancha. El director de L’Ecole de la Paz enfatizó que no es
posible construir la paz sin los militares, y aseguró que en Chile se dio un
paso muy grande y a futuro se darán más pasos para fortalecer esta construcción
La guardia territorial
El general ® Alberto Müller –que trabaja junto al Presidente Chávez-, por su
parte, informó que en su país, Venezuela, se acaba de promulgar una nueva Ley
Orgánica de las Fuerzas Armadas que legaliza la creación de la guardia
territorial, compuesta por grupos populares organizados para la resistencia en
caso de una invasión. Müller, quien fuera embajador de su país en Chile años
atrás, calificó de "abstracto" el debate santiaguino en torno a las amenazas a
la paz. En Venezuela, explicó, el soldado-ciudadano se ha transformado en un
ciudadano-soldado que cuenta con plenos derechos cívicos.
La búsqueda de mecanismos de resolución de conflictos, con los militares como
facilitadores del proceso junto a todos los restantes actores de la sociedad
civil, fue la tesis sostenida por el general Gérard Bézancier, actual comandante
de la región noroeste del ejército francés y tercero al mando. En la
inauguración del evento, en el Centro Cultural San José (comuna de Recoleta), el
oficial galo sostuvo que la invasión de Irak demuestra que la guerra no es la
solución. Se mostró partidario del control democrático de las fuerzas armadas
por la civilidad a través del Parlamento y entregó un manual sobre el tema a
Jaime Gazmuri, vicepresidente del Senado chileno.
A su turno, el general ® Hugo Medina, de Colombia –en retiro desde hace dos
años- sostuvo que en su país el conflicto con la guerrilla, que se arrastra por
40 años, no tiene origen militar, por tanto no se puede resolver con la guerra.
El ministro de Defensa de Ecuador, coronel Oswaldo Jarrín, llamó a centrar el
concepto de seguridad en la atención al ser humano, sus aspiraciones y una mejor
calidad de vida.
Democratización de las Fuerzas Armadas
El coronel ® argentino Horacio Ballesteros, presidente del Centro de Militares
Democráticos de Argentina (CEMIDA); el coronel Pedro Aguerre, de Uruguay, y los
chilenos Ernesto Galaz, ex comandante de la Fuerza Aérea; Carlos Pérez Tobar, ex
oficial de ejército ®, y Teodocio Cifuentes, cabo segundo de la Armada,
exonerado, recordaron su paso por la prisión y el exilio, y su voluntad de
luchar por la paz. Ellos sostuvieron que la democratización no ha llegado aún a
las fuerzas armadas latinoamericanas, que mantienen la estructura anterior y
también su formación, ligada a la doctrina de la seguridad nacional y a
hipótesis de conflicto obsoletas. Plantearon que además de ponerse en vigencia
el derecho internacional en materia de derechos humanos, y de buscar la
cooperación y la complementariedad en lugar de la confrontación, deben
establecerse leyes que incorporen la objeción de conciencia y el derecho a no
acatar órdenes ilegales.
Sostuvieron que las fuerzas armadas deberían participar en la administración del
Estado. Hicieron ver además que debe reformarse la justicia militar. Civiles
presentes plantearon también la necesidad de erradicar la práctica de la tortura
en cuarteles y detener el avance de la impunidad, como condicionantes para el
diálogo y la superación del miedo instalado en la sociedad.
Concepto integral de paz
En el nuevo rol a desempeñar por las fuerzas armadas, se señalaron tareas
vinculadas con la sustentabilidad ambiental. El almirante ® de India, L. Ram Das
señaló: "La paz es holística. No puede haber paz sin justicia. Se hace dentro y
fuera de uno mismo, en la sociedad, la comunidad, la región, los vecinos y el
globo. Con el viejo concepto de nación-Estado, las fronteras justificaban la
existencia de la defensa. Pero el mundo del futuro es diferente. Tenemos que
mirar los seres humanos integralmente, pero también los derechos de la tierra y
de la naturaleza, tener conciencia que pertenecemos a la madre Tierra, que somos
apenas un pequeño fragmento en el universo. Tenemos que usar la tecnología
moderna y el conocimiento para mejorar la calidad de vida de todos los seres
humanos, pero también de los animales y de todos los seres".
Condiciones para la paz
Carlo Novoa, jesuita especialista en ética y formador de oficiales en Colombia,
desarrolló la posición de la iglesia católica y de Naciones Unidas, abogando por
el desarme total y la reconversión de ejércitos e industria militar al servicio
social. El pastor luterano Helmut Frenz –quien fuera uno de los gestores del
Comité Pro Paz luego del golpe militar- había expresado, al inaugurarse el
encuentro, que actualmente hay una guerra contra los pobres, contra los
refugiados que son tratados como enemigos por los países que temen verlos
entrar, y hay una guerra contra la naturaleza y el medio ambiente. Llamó
entonces a crear condiciones para darle una oportunidad a la paz.. El ex
brigadier Rao Abid Hamid, de Pakistán, a su vez, expuso su experiencia como
fundador de la Comisión de Derechos Humanos de su país y activo impulsor del
movimiento por la Paz entre India y Pakistán, junto a Ram Das, también presente
en el encuentro.
Ambos señalaron que el intercambio directo entre jóvenes de India y Pakistán,
países que en tres oportunidades se han enfrentado bélicamente, ha generado una
nueva situación en que los prejuicios y desconfianzas están disminuyendo.
Una democracia plena
El general ® Muller enfatizó que en Venezuela "tenemos un nuevo Estado en la
sociedad y en materia militar, con un nuevo modelo de democracia participativa.
Las políticas y disposiciones legales pueden ser derogadas vía referéndum de
mandato, que permiten remover gobernantes. Son millones los venezolanos que a
través de las Misiones ahora cuentan con salud, educación y alimentos y que
antes estaban postergados y marginados". Por su parte, Ram Das expresó:
"Nosotros en India podemos decir que tenemos una democracia política exitosa, ya
que es el único país de la Región que se ha mantenido desde su independencia con
gobiernos democráticos, respetando la diversidad y multiculturalidad étnica y
religiosa de nuestra gente. Pero esta democracia no es exitosa social y
económicamente; existen castas, prejuicios por color y otros vicios."
Los organizadores invitaron a Cuba, que no se hizo presente, sin embargo el ex
almirante de la India, aludió a la isla: "Cuba escogió su propio camino. Pero
los peces gordos no pueden soportar que otros disputen porciones del poder. A
ellos les incomodan las experiencias de otros pueblos, En el mundo de hoy
estamos retrocediendo en lugar de estar avanzando. Debemos cambiar esa cultura
de la desconfianza".
Finalmente, los asistentes concordaron en que los gobiernos no deben involucrar
a miembros de las ffaa en la represión a las luchas populares, tema planteado
por la académica boliviana Loreto Tellería, del Observatorio de Democracia y
Seguridad, que implementó un alerta sobre el uso de la fuerza en los conflictos
sociales.