El Congreso aún no ha dado el visto bueno final al reparto de
diputados entre unos departamentos y otros
Elecciones en Bolivia
Sodepaz
Hoy día 20 es el último indicado tras semanas en el Congreso de Bolvia, para
dilucidar si los candidatos a presidente, prefecturas y diputados, renuncian a
sus cargos anteriores, para optar a la elección de diciembre.
Los partidos están en plena campaña, pero el Congreso aún no ha dado el visto
bueno final al reparto de diputados entre unos departamentos y otros, que se
pelean en base a un pronunciamiento de la Corte Constitucional...
"Hay una constatación muy concreta en la historia de Bolivia: esto es que el
país en su territorio e historia es profundamente indio, pero desde el poder,
los blanco.mestizos han hecho un desfalco económico, territorial y emotivo
además de histórico sobre los Pueblos Indígenas.." dice Pablo Mamani, director
de la carrera de sociología en la Universidad de El Alto, la más jóven de toda
América..
Y la preocupación de las clases dirigentes, blanco-mestizas, es por la
posibilidad de que una propuesta de centro-izquierda como la que lidera un
indio, Evo Morales, puede llegar a la presidencia en enero...
Por ello ponen toda suerte de zancadillas: en cuestión están dos temas
centrales: el enjuiciamiento y castigo, o no, al genocida ex-presidente,
poderoso empresario Sánchez de Losada, autor de las ordenes de asesinato de más
de 120 personas, y heridas perennes para otras 400.. y el trato a dar a las
poderos´sisimas empresas petrolres, entre ellas la Repsol española...
"Bolivia se dirige hacia una lucha social generalizada: Si se mantiene intacta
la estructura formal del Estado (los tres poderes), sería como un pachakuti a
medias para los indígenas. Una especie de pachakuti sin terminar... Si se
produce Reforma Constituyente, el 70% de la población, que es indígena, debería
tener su participación directa con su cosmovisión, principios del ayllu y alto
sentido de política social....Si se agotaran las dos anteriores se daría una
revolución india, que significaría la reconstitución del gran Qollasuyu, pero
con un nuevo modelo político, cultural, social y territorial.
Esta última posibilidad, para muchos líderes no significa romper con Bolivia: se
trataría de un Qullasuyu incluyente al igual que los colores de la Whipala"...dice
Pablo Mamani, intelectual aymara..