Argentina: La lucha continúa
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Un viraje peligroso: de los derechos humanos al autoritarismo
Prof. Juan Carlos Sánchez
Con el inicio de la campaña electoral, comienza a advertirse una peligrosa
tendencia hacia el autoritarismo presidencial para revelar, una vez más, la
enésima contradicción entre el discurso y los hechos con respecto a los Derechos
Humanos.
La denuncia efectuada por la Senadora Nacional, Dra. Cristina Fernández de
Kirchner, candidata a la senaduría por la Provincia de Buenos Aires, durante el
acto del Frente de la Victoria en Rosario debe ser leído a la luz de la
justificación de la actual y creciente represión y judicialización de la
protesta social.
En efecto, en un lanzamiento formal de campaña electoral puede comprenderse la
pirotecnia verbal de los oradores pero cuando procede del oficialismo, sin
dudas, marca un camino hacia el futuro inmediato y mediato. Desde luego, tampoco
podemos olvidarnos que este puntapié inicial del kirchnerismo era bastante
previsible teniendo en cuenta las expresiones del Ministro de Salud y Ambiente
Humano de la Nación, Dr. Ginés González García, cuando calificó a los
trabajadores en conflicto del Hospital Garraham como 'terroristas sanitarios' y
olvidando que la política sanitaria no es solamente la cuestión salarial sino el
debido aprovisionamiento de insumos a los hospitales públicos y a los malditos
programas sanitarios impuestos por el Banco Mundial.
Sin embargo, y siguiendo el hilo de los acontecimientos, nos encontramos ante
una película que hemos visto durante el menemismo: la típica afirmación de yo o
el caos, en versión femenina, que tiene en cuenta las encuestas y el fervor de
los multimedios en pos de una definitiva criminalización de quienes defienden
sus derechos, pese a la represión explícita e implícita. Pero tampoco podemos
olvidar que esta denuncia nos lleva a pensar en un titiritero que teníamos
olvidado: Menem...
Mientras la pulseada entre Kirchner y Duhalde sigue deslizándose entre los
mitines y el Congreso Nacional y el de la Provincia de Buenos Aires, se advierte
que, una vez más, los hechos comienzan a revelarnos la resucitación de la
estrategia duhaldista para la represión y más allá, desde luego, de los dichos
de Luis D' Elía sobre el gran líder bonaerense...
Que el árbol no nos tape el bosque... Aunque las fases preelectorales nunca
fueron tranquilas, pues siempre existe un alto grado de tonos descalificatorios
hacia el adversario o hacia su gestión, no está demás comenzar a pensar, a
recordar la película de los `90 y del último tramo de la Presidencia de Duhalde.
Por supuesto, siempre pensando en el medio pelo argentino, el que queda luego
del genocidio económico neoliberal, cuyos integrantes siguen pidiendo represión
de manera implícita en aras de preservar sus pertenencias, al decir de Serrat...
Son ellos, los que colman las encuestas y las opiniones en los multimedios para
exigir 'que se haga algo con los piqueteros' y esto es lo que mueve a la actual
coyuntura con la represión en la Rural, durante la presentación de Lavagna y con
el dique represivo a los piqueteros en el Puente Pueyrredón y en las cercanías
de la Plaza de Mayo.
Mientras tanto, el gran titiritero que descuidamos sigue haciendo de las suyas
mediante Luis Patti, ese oscuro comisario del caso María Soledad Morales, o su
nuevo aliado, después de muchas discusiones públicas y abrazos en privado, como
Rodríguez Saá. También sigue tentando a López Murphy, a pesar de sus desmentidas
y a Jorge Sobisch... ¿Quién le pondrá el cascabel? No sabemos...
Los hechos de los últimos días nos vuelven a demostrar el eterno doble discurso
kirchnerista, muy conocido en Santa Cruz, que lleva a un viraje demasiado
peligroso para la actual coyuntura porque significa, lisa y llanamente,
desmentir el respeto a la categoría de derechos que tanto se proclama defender.
Más aún cuando, en la actualidad, basta una chispa para la explosión social y de
allí, existe un trecho demasiado corto que puede llevar a un autoritarismo de
consecuencias impredecibles pese a los buenos augurios proclamados por parte del
Gabinete Nacional y difundidos ampliamente por la prensa usufructuaria de la
publicidad oficial.
Estamos ante un viraje de la política interna en consonancia con los postulados
de Rumsfeld y del Imperio, en espera de esa Cumbre de las Américas que se
realizará en una Mar del Plata invadida por policías de toda laya, nacionales e
internacionales...
De los Derechos Humanos al autoritarismo, parece ser que es la consigna dada por
el Norte ante la creciente protesta social y llevada a cabo, sin fisuras, por un
gobierno y por gobernantes que siguen soslayando la pobreza y la indigencia de
la mayoría de sus gobernados para satisfacer las apetencias de las
transnacionales y de la oligarquía nacional.
Mientras crece el superávit fiscal y los índices macroeconómicos son festejados,
la democracia se pone en peligro mientras las pulseadas pejotistas siguen su
tren a toda velocidad, ignorando lo que acontece a su alrededor y se deja de
lado la deuda interna para privilegiar la externa...
Tal vez, la ciudadanía de las grandes mayorías y no, la de ese medio pelo será
la que se haga escuchar a pesar de la indiferencia de los multimedios y sus
manuales de estilo. Ojalá que estos fantasmas acerca de la fragilidad de esta
democracia joven sean sólo eso: fantasmas y no, la antesala de otra tragedia...
* Juan Carlos Sánchez es Profesor de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales en
I.S.P.'Dr. Joaquín V. González'.