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Argentina: La lucha continúa
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MARTÍN SUÁREZ
"La regla siempre ha sido que la justicia sea cómplice del
gatillo fácil.
Que actúe como agente del disciplinamiento social.
Cuando el encubrimiento primario que el propio sistema lanza como anticuerpo,
cuando camaradas y políticos no pueden proteger y cuando la
lucha popular los sobrepasa
y los lleva al banquillo, aparecen jueces que son los garantes para que la
represión continue gozando.
Es normal que los sobresean, y es habitual que los absuelvan."
CORREPI
MARTÍN TENÍA 17 AÑOS
El joven fue interceptado el 29 de agosto de 2002, las calles de Munro, por el Sargento Roberto Sandroni, el oficial Julio Morinigo, dos civiles, Ezequiel Grecco y su primo que lo acusaron de haberle robado un par de zapatillas. Fue trasladado a la Comisaría 3º y al día siguiente, el 30 de agosto de 2002, murió a causa de los golpes que le habrían propinado el suboficial Roberto Sandroni y Fernando Grecco, con complicidad de oficial Morinigo y el primo de Grecco
En esa oportunidad, Oscar Suárez denunció que su hijo fue "salvajemente" golpeado por dos policías y dos personas de civil, y que a raíz de esas lesiones murió al día siguiente en su casa de Carapachay.
Hoy 23 de mayo de 2005, el tribunal compuesto por el Dr. Federico Guillermo Ecke, Dr. Osvaldo Rossi y Dr. Hugo Santillán, leyó la sentencia, absolutoria para los policías y condenatoria para el estudiante asesino, pero no dieron a conocer los fundamentos de la decisión. El Tribunal Oral Criminal 4 resolvió absolver al sargento de la policía bonaerense Roberto Sandroni y al oficial Julio Morinigo, mientras que condenó al estudiante asesino Ezequiel Fernando Grecco a tres años de cárcel, en la causa en la que fueron juzgados por la muerte de Martín Suárez.
El fallo fue cuestionado por la familia de Suárez y repudiado en una ruidosa protesta en el hall de los Tribunales de San Isidro.
Algunos de los implicados en este hecho, también habrían participado en la desaparición de Raúl Saliwoncyh, el Boli, ocurrida en la misma zona tres meses antes, el 10 de mayo de 2002.
Es habitual que un mismo policía cometa más de un asesinato y todos queden impunes. No sólo se trata entonces de policías perturbados que andan por ahí matándonos; detrás de ellos hay todo un sistema de jueces, fiscales, políticos y funcionarios que también son responsables. Y los vecinos, mientras tanto, vamos comprando cotidianamente falsas teorías de la seguridad con las que nos envuelven tanto los discursos oficiales como muchos periodistas estrella.
COMISIÓN CONTRA LA REPRESIÓN POLICIAL Y LA IMPUNIDAD EN ZONA NORTE
Bastayaderepresion@hotmail.com
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