El gobierno K se ha sabido vender como el gobierno de los derechos humanos.
Hipócritamente se muestran como respetuosos de los DDHH, impulsores de la lucha
contra la impunidad, y otra sarta de mentiras y demagogias que han encontrado
'compradores' tanto dentro como fuera del país.
Con la nómina de fusilamientos por parte de las policías de todo el país que le
enrostramos a K y sus aliados y con la cantidad de presos políticos que llenan
las cárceles de todo el país, sólo los ingenuos o los oportunistas pueden
sostener que han habido 'avances en materia de derechos humanos'. O aún peor,
afirmar que 'Argentina sea un ejemplo en materia de derechos humanos' como
literalmente expresó el director para 'las Américas' (es decir algo así como la
resaca de la gran América que son los yanquis) de la organización estadounidense
Human Rights Watch, José Vivanco.
Vivanco, que se reunió con el canciller de la ocupación a Haití, Rafael Bielsa,
dijo estas frases y otras más, en consonancia con muchos cómplices de acá, que
lo único que ven a la hora de los derechos humanos es la promoción de la nulidad
de las leyes de impunidad y la promesa de entrega de algún predio militar vaya a
saber todavía para qué.
A Vivanco -que de ingenuo no tiene nada- le sugerimos releer el propio informe
de su organización respecto de la situación de DDHH en la Argentina para el año
pasado. Aunque sostenido en el lenguaje edulcorado de ciertos organismos, allí
HRW señala el accionar policial represivo, claro que con términos 'correctos'
como abusos o brutalidad, y denuncia las condiciones infrahumanas de detención
de personas en Argentina.
¿O para Vivanco la represión policial no es más que la aplicación sistemática de
la defensa del capitalismo y no entra dentro del concepto de 'retrocesos' en
materia de DDHH?