Argentina: La lucha continúa
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Las razones de la falta de lluvias en la provincia
Un desmonte para la tragedia
Por A. F. D.
Página 12
"Aunque la sequía del ‘30 haya quedado como ‘la sequía’, cada escasez tiene
mayor o menor impacto en la historia. Y en el Chaco se está haciendo todo lo
posible para que cada nueva sequía sea más dura. Cada hectárea de bosque es una
fábrica menos de agua, suelo y clima. La mayor parte de la masa viva tiene más
de un 60 por ciento de agua. A su vez hay agua en el suelo y subsuelo. Entonces,
si se desmonta, no sólo se destruye el sistema que conserva agua, sino también
el único que puede reducir el poder destructivo de las sequías." Así analiza la
crisis del Chaco Raúl Montenegro, titular de la Fundación para la defensa del
Ambiente y Premio Nobel Alternativo 2004. En diálogo con Página/12, el biólogo
afirmó que "en el Chaco, las variables climáticas ya son difíciles de predecir
porque se explota la región con un modelo traído desde la pampa húmeda. El
bosque se convirtió en una etapa del sistema productivo que termina siendo
tierra para la agricultura; tierra perentoria porque las plantaciones de soja le
quitan al suelo todos sus minerales y lo vuelven inútil, de tal modo que lo que
avanza es el desierto".
En el Chaco, la ampliación de la frontera agrícola para la siembra de soja
transgénica oscila entre las 30 y 50 mil hectáreas por año. "En la Argentina
existe el Sistema Federal de Emergencias (Sifem), que no está haciendo nada por
esta sequía. Y los responsables son los gobiernos que miran para otro lado.
Claro, como se bajan montes y aumentan las retenciones, la elección es clara".
Pero lo más "trágico", añadió, son las consecuencias humanas: "Los que pagan
este desastre son los que no se pueden mover del monte, los más pobres: los
wichí, mocovíes y quom estarán condenados a vivir en el desierto. Los que tiene
más dinero van a migrar cuando haya más calor, menos agua y más desierto".
En su óptica, la solución es compleja "y no se puede andar abasteciendo a toda
la provincia con simples camiones". Lo que asegura el balance de los recursos
hidrogeológicos (aguas subterráneas) y los superficiales (canales y
reservorios), y las condiciones de los períodos climáticos más calientes, es la
conservación de los bosques nativos". Sin embargo, "si las escuelas del Chaco no
enseñan a los chicos el porqué de la importancia del bosque, poco podremos hacer
los que luchamos por ellos desde hace tiempo".