Argentina: La lucha continúa
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López y "Nuestra Voz"
Andrés Sarlengo
El poder pretende un monólogo bajo sus pies. Si persisten muchas voces que se
expresan habrá que aplastarlas. Sólo una es la que vale, legitima y garantiza
las trapisondas de los opresores y acaudalados. Así debe ser.
Poder y consentimiento.
El periodista Carlos Del Frade fue querellado judicialmente por el presidente de
Newell´s Old Boys Eduardo López. Así lo manifestó en su programa radial Otros
Mundos emitido por LT 8 de Rosario. Ocurrió a principios de noviembre de 2005.
Días después en una pequeña comuna del sur santafesino Del Frade entusiasmó a
más de 100 jóvenes y adultos que concurrieron a escucharlo. Repitió ( y ellos
atendieron) una figura clave que describe los últimos 30 años de la historia
argentina: 666. Seis de cada diez desaparecidos en Santa Fe durante la pasada
dictadura cívico militar tenían entre 15 y 30 años. Seis de cada diez
desocupados en nuestra provincia tienen actualmente entre 15 y 30 años.
Y seis de cada diez detenidos o personas en conflicto con la ley penal poseen
hoy entre 15 y 30 años. El 666 es la bestia apocalíptica.
Un joven que posiblemente estudiará abogacía el año venidero quedó conmovido.
Estaba sentado a mi lado y junto a sus compañeros del polimodal habían
organizado la charla debate en la feria libro de Santa Isabel. Espero que si
alguna vez nos volvemos a encontrar: ese joven impresionado defienda e
interprete al derecho como sinónimo de bienestar para las mayorías.
A Del Frade lo entrevisté una vez terminada la conferencia. Sentados y
compartiendo el aire fresco de una noche rebelde, jovial y aleccionadora me
contó la impúdica decisión del presidente del club rosarino: "Eduardo López
presenta en el Juzgado Correccional Nº 9 una querella por supuestas calumnias e
injurias contra mí. No es por el libro "La Ciudad Goleada" sino por una nota que
publiqué en el periódico El Eslabón que habla sobre que la culpa no es del
chancho, diciendo que cuando él cerró hace un mes atrás el diario El Ciudadano
lo hacía con absoluta impunidad porque en realidad López es y hace y deshace
porque mucha gente con poder lo deja hacer y hacer y deshacer. Eso fue lo que
escribí. No hay calumnia ni injuria. Pero lo que pide López y ahí está el por
qué hace esto... pide que me abstenga de nombrarlo a él en cualquier programa de
radio o TV donde yo esté y además solicita que me abstenga de escribir sobre él
en cualquier lugar y fundamentalmente en Internet durante el tiempo que dure la
investigación sobre sí hubo calumnia e injuria. O sea que está pidiendo
judicialmente una censura".
Con todo: ningún Juzgado -hasta el momento- ha dado lugar a la demanda de
Eduardo López.
Quién siga- asimismo- la tarea profesional de Del Frade sabe que no ejerce
mayormente en los grandes medios. De ahí su extrañeza ante la actitud del
dirigente de Newell´s y propietario de El Ciudadano. "Lo realmente llamativo es
que te censuren estando ya no en los grandes medios de comunicación si no en los
arrabales de la comunicación. Esto demuestra que aún desde los pequeños medios
se puede hacer periodismo y se le puede embromar a la gente que tiene
supuestamente mucho poder", subrayó el autor de "Ponce de León, dos veces
desaparecidos".
¿Será así? ¿Desde el periodismo crítico y comprometido se podrá limitar y
contrarrestar la desmedida ambición de los poderosos? ¿Alcanzará solamente con
el oficio "de dar testimonio en momentos difíciles"? Sí, quizás se ayude y
colabore- en verdad- con el cambio social requerido. Pero sin
participación y organización popular nada será posible. ¿Se debatirá en la
Cumbre de la Sociedad de la Información en Túnez y en el II Congreso Mundial de
Periodismo y Comunicación de Buenos Aires semejante labor impostergable? ¿Cómo
frenar la omnipotencia de las transnacionales de la desinformación y sus
gerentes locales que transmiten cuatro de cada cinco mensajes que circulan en el
mundo? Sin recaer en la soberbia y en manuales sabelotodos: ni Túnez ni Buenos
Aires tienen la respuesta absoluta.
Desde el sur santafesino- empero- y sin apartarnos de la esencia misma de este
artículo; recordaremos una experiencia que bien valdría que se resaltase ( en
simples cartelones o a viva voz) en Buenos Aires y Túnez.
"Nuestra Voz" nació el 12 de setiembre de 1987 en el Bajo de Saladillo
(Rosario). La idea original de crear esa radio parlante fue de Carlos Del
Frade y Ricardo Horvath. Cuando lo consulté a Horvath vía correo electrónico: me
respondió irónicamente que "no me acuerdo, pero si él (Del Frade) lo dice, ha de
ser así". No obstante, en La Trama Secreta de la Radiodifusión Argentina
II, Horvath reseña el acertado intento de comunicación comunitaria. "Solamente
teníamos la bocina y el micrófono y anunciamos nuestro propósito. Un hombre se
acercó con tres discos. Le agradecimos pero le explicamos la imposibilidad de
difundir música por no tener tocadiscos. Al rato otro trajo casetes y se llevó
la misma respuesta: no teníamos grabador. Uno de los muchachos del barrio
sugirió acercar una radio a transistores al micrófono para tener música, hasta
que aparecieron dos pibes, cada uno con un parlante y una mujer con un
pasacasete. Los vecinos comenzaron a comunicarse: se leyeron notas de
felicitación por cumpleaños, un muchacho tocó la guitarra para los chicos de la
villa. De esta manera se repite la experiencia sábado a sábado de 15 a 19. Las
vecinas indican recetas de comida verdaderamente económicas y arriman discos
para difundir. La propaladora acerca a los vecinos e informa sobre sus
necesidades", relató Del Frade y así resulta registrado en la página 254 del
libro que hoy "socarronamente" su autor afirmar "no recordar".
"Nuestra Voz" para Del Frade "fue" una "belleza". ¿Qué me podes decir de esa
radio parlante que vos inauguraste?, lo interrogué esa noche jovial, rebelde e
instructiva en Santa Isabel. "... Fue con Ricardo Horvath... que luego él lo
retoma. Eso fue una cosa hermosa, fue en el año 86-87 en el Bajo Saladillo,
construimos una radio popular a través de un megáfono y la gente del lugar
cuatro meses más tarde lo convirtió en una Cooperativa de Consumo y Producción.
Fue una experiencia hermosa... mira vos hace casi 20 años, fue a partir de un
Wincofon, celebrábamos los cumpleaños de 15 de las chicas, los anunciábamos, los
archivos eran cajas de zapatos y transmitíamos los sábados. Una belleza",
rememoró el también redactor de "Los gauchos malos de la prensa argentina".
Memoria, archivo, pasión, ironía, compromiso, palabras andantes, participación
popular, ética, coherencia. Que más se puede pedir entre tantos señores
prepotentes y empresarios acomodaticios y corruptos.
Sí, tal vez con el libro, la pluma y la voz alzada no se logre cambiar el mundo.
Pero no hay que dejar de intentarlo. "Nuestra Voz" pudo con su objetivo:
además "de transmitir, de recibir, de hacer que el oyente escuche" hizo que...
"hable". Como lo sugería Bertolt Brecht. Que hable y escriba su propia historia.
En esta semana espero que en Túnez y Buenos Aires el diálogo prime
insoslayablemente. "Para dialogar, primero pregunta y después escucha. Es decir
busca la verdad en compañía, sin imponer la propia". Antonio Machado así lo
pensó. Dialéctica y no susurros monocordes del poder. López, Manzano, Murdoch o
Walt Disney poco difieren en sus intenciones.
Desde el sur santafesino: "Nuestra Voz" siempre permanecerá vigente. En la
memoria y en cada uno de nuestros actos. Por más que no figure en las currículas
universitarias o se la pretenda acallar para beneficio de los "exitosos
empresarios de la desinformación planificada".
"Nuestra Voz" tiene que ser usted mismo. Y para siempre.