Latinoamérica
|
Referendum revocatorio: dia decisivo para america latina
por que y con quienes arraso chavez
Modesto Emilio Guerrero
Argenpress.info
(12:02 AM Hora de Caracas – 01:02 Hora de Buenos Aires) A las 10 de la noche
de este domingo interminable, 9 fuentes calificadas dan como ganador a Chávez
con algo más del 60 por ciento. 7 de esas fuentes son oficiales y dos de la
oposición antichavista.
La abstención, verdadero agujero negro del Referéndum, habría quedado en
alrededor del 15 por ciento. O sea, algo así como la cuarta parte de la masa
poblacional que se negó a votar en los últimos 9 años. Esto sería, un poco más
un poco menos, la confirmación del pronóstico que manejaron los mejores estudios
internacionales de opinión y los del gobierno.
Si se verificase el nivel de abstención señalado, deberemos registrar un
poderoso fenómeno político en Venezuela. Quizá, la expresión más profunda del
derrame de la renta petrolera sobre los sectores más pobres y olvidados del
país. Tres de cada cuatro desentendidos de la vida política, decidieron
interesarse, aunque sea a través del voto.
La confianza iría más allá de la propia personalidad imantadora de Chávez;
significaría que un amplio sector de masas volvió a confiar en el sistema
político electoral. Una novedad si se tiene en cuenta las tendencias en
contrario en América latina.
Por la profunda opresión que sufre este sector social, suele ser la base social
de las tendencias más riesgosas, especialmente cuando se trata de hacer avanzar
un proceso revolucionario. Si muchos votaron por Chávez, entonces la
transformación de la sociedad venezolana deberá asumir desafíos complicados.
Radicalizaciones más profundas.
Estos son los resultados más sólidos que emergen de las tendencias y señales de
los Centros de Votación. Así se fue manifestando en distintos resultados
parciales, procedentes de las más diversas organizaciones y sectores.
En casi todos los casos, la determinante incuestionable del triunfo, fue la
energía desbordada por las amplias vanguardias comunitarias y sus medios
informativos movilizadores.
Ellas organizaron y dinamizaron las 117.987 patrullas electorales construidas
hasta días antes del final de la campaña de Santa Inés. En esas organizaciones
de base militaron alrededor de un millón de vecinos, trabajadores industriales y
de servicios, estudiantes, campesinos, empleados públicos y artistas.
Un sector clave fueron los más de 4 millones de nuevos cedulados, dentro de los
cuales más de un millón todavía no salen de su asombro porque aprendieron a leer
y escribir gracias al gobierno bolivariano.
Las fuentes menos confiables
Quienes le dan menos puntaje de ventaja a Chávez, lo distancian como triunfador
con 10 puntos de delantera. Más o menos.
El Centro Carter, por ejemplo, sobre un mapa de datos propios, tomados en los
centros de votación de Caracas y Miranda, desde las 4 de la tarde, dejaron
correr el informe siguiente: Chávez ganará con por lo menos el 60%.
Por su parte, la Coordinadora opositora contabilizó datos aportados por sus
centros de cómputos ubicados en sendos bunker dentro de las Quintas 'Monteverde'
y 'Unidad'. Según ellos el jefe nacionalista ganará con el 62%, un guarismo muy
cercano al que hizo el Centro Carter.
El valor de este resultado está, en primer lugar, en que viene del enemigo, el
menos gustoso de decir resultados dolorosos como ese. Pero hay otras razones.
Ellos incluyeron informes parciales de sus organizaciones intermedias, de sus
fiscales de Mesa y de los rectores que tienen en el Consejo Nacional Electoral.
La fuente empresarial que confió a esta agencia 'el dato' de la Coordinadora,
bajo resguardo de anonimato, asegura que el mal humor se hizo inevitable entre
los principales referentes escuálidos desde las 4 de la tarde.
Según la misma persona, 'ellos habían asegurado un triunfo leve o una derrota
suave'. Esa era la fórmula consoladora. Pues ni la una ni la otra. La cuenta de
la Coordinadora registra información que comenzó a recabarse a las 7 de la
mañana y se cortó a las 4 de la tarde. Siguieron el mismo criterio del Centro
Carter: usar una muestra de 10 horas de votación.
Un experto del Consejo Nacional Electoral al que consultamos, señaló que a esa
hora de la tarde, ya se habían contabilizado un promedio de 50 por ciento del
total del padrón electoral. Casi 14 millones de electores.
El triunfo de la Venezuela profunda
Es importante anotar que el triunfo chavista se asienta en 11 Estados. Primero,
por su concentración poblacional, segundo, por la multiplicación de la fuerza
social ganada por las vanguardias comunitarias bolivarianas en los últimos doce
meses.
Esos Estados son Distrito Federal (la Capital), Aragua, Monagas, Miranda, Lara,
Guárico, Carabobo, Bolívar, Barinas, Anzoátegui y Portuguesa. Cuatro componen la
masa social del concentrada en el centro del país, con un alto grado de
politización. Tres son estados situados al oriente del país, con un nuevo
proletariado petrolero y de otras ramas industriales, pero sobre todo, con un
desarrollo de cooperativas y agrupaciones comunitarias de lucha y organización
social poderosas.
Finalmente, están dos estados llaneros, postergada vida cultural, pero donde se
han desarrollado importantes -y nuevos- movimientos campesinos. Además, uno de
ellos, Barinas, es el suelo del presidente, cuyo Gobernación la dirige su padre.
Hay zonas donde el chavismo 'de base' le dio el voto a Chávez, sin que eso
comprometa alguna simpatía con los gobernadores 'chavistas'. Esos son Aragua o
Vargas, donde no son queridos, pero contradictoriamente, los movimientos
chavistas son muy fuertes y organizados.
Hubo cinco Estados donde el presidente venezolano ganó con escasa diferencia:
Mérida, Zulia, Falcón, Nueva Esparta y Vargas. Quizá se explique por el peso
relativo de las clases medias, o por el rechazo a sus funcionarios
gubernamentales, como es el caso de Vargas.
El enemigo gobierna en 7 Estados provinciales y en el Distrito Capital. Si
tomamos la Capital como muestra, sorprende descubrir que allí donde manda
Alfredo Peña, un golpista declarado, el bolivarianismo amplió su fuerza
electoral.
Mientras más se baja en la escala social más se amplía la masa de electores y
más crece la simpatía por el líder de la 'revolución bolivariana'. Un caso
espectacular es la zona conocida como la 'Cota 905', al sur de Caracas. Un
sector donde votaron unas 6.000 personas. En los 588 habitantes de clase media,
el NO ganó por el 50% y entre los 6.000 pobres muy pobres, SI quedó reducido al
10% de los votos sufragados. el No ganó con el 90%.