Latinoamérica
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Referéndum sobre el gas
Declaración del Partido Comunista de Bolivia
1.- La figura política del referéndum, ahora incluida en la Constitución
Política del Estado (CPE), es una conquista popular cuyo objetivo era
convertirla en un arma de la ciudadanía para oponerse y frenar, al menos, las
políticas entreguistas, depredadoras, antisociales y antidemocráticas de los
gobiernos neoliberales. En 1996 el gobierno de Sánchez de Lozada, el principal
operador del neoliberalismo en el país, se opuso tenazmente a la realización de
un referéndum que habría sido adverso a su política enajenadora del patrimonio
nacional, particularmente de los hidrocarburos. En ese momento, el movimiento
popular se oponía a la llamada capitalización de YPFB y a la entrega de las
reservas de hidrocarburos a las transnacionales petroleras. Sánchez de Lozada
acudió a la represión, a la intimidación, al chantaje y a la compra de
parlamentarios, dirigentes sindicales y sociales para imponer sus leyes de
Hidrocarburos y de Capitalización, aun en contra de la CPE. Es así cómo se
consumó una verdadera traición a la Patria, una traición que pisoteaba la
memoria y el sacrificio de todo un pueblo y sobretodo de los que cayeron en la
Guerra del Chaco defendiendo el petróleo boliviano.
2.- El referéndum no puede convertirse en trampa.- El gobierno de Mesa, que cada
día descubre más y más su carácter neoliberal y continuista pretende desvirtuar
la esencia democrática del referéndum para convertirla en instrumento mañoso, de
manipulación y tergiversación de la opinión pública. Mesa cree que, con sus
artes de comunicador sin principios, podrá burlar la inteligencia del pueblo
boliviano. No es ni será así. La decisión del pueblo es inconmovible y
encontrará las vías que lo conduzcan a rescatar la Patria y la Soberanía
nacional, hoy menoscabada por las transnacionales y sus agentes en el gobierno y
en la pseudo oposición de la derecha.
3.- La naturaleza manipuladora y tergiversadora del gobierno de Mesa está en las
5 preguntas del referéndum del 18 de julio. La pregunta 1 ("abrogación de la Ley
de Hidrocarburos de Sánchez de Lozada", pretende una ruptura con la política del
fugitivo ex presidente. Pero la verdad es que el proyecto de Ley de Nogales-Mesa,
no implica el rescate de derecho propietario de los hidrocarburos. No toca para
nada, y AHORA MISMO, los 76 contratos con las transnacionales que seguirán
vigentes y seguirán haciendo negocios con los hidrocarburos, dejando migajas
para el país. El derecho propietario y la soberanía sobre los hidrocarburos es
una ficción, sin la revisión AHORA de los contratos con las transnacionales.
La pregunta 2 ("rescate de la propiedad de los hidrocarburos en boca de pozo")
está estrechamente relacionada con la primera, es para el "FUTURO"; entraría en
rigor dentro de varias décadas. La pregunta 3, ("refundar YPFB"), es acaso la
más tramposa; pretende hacer creer que recuperamos la soberanía sobre el gas y
los condensados, al "refundar" YPFB, con el teórico 49% (del 50% que posee
Andina, por ejm.), de las acciones y utilizando el Fondo de Capitalización
Colectiva (FCC). Pero eso se refiere apenas a dos campos (San Antonio y San
Alberto), en los cuales opera la "capitalizadora" Andina. En los otros campos,
todos entregados a transnacionales, nada tienen que hacer, ahora, ni el Estado
boliviano ni YPFB, ni tendrá qué hacer con la ley Nogales-Mesa. En suma, de los
40 trillones de pies cúbicos (TCF) en juego, YPFB sólo podría manejar 3,4 TCF,
insignificancia que no afecta para nada los negocios de las transnacionales. Las
reservas de 40 TCF están certificadas hoy y eso es lo que debe rescatarse.
La pregunta 4 ("estar de acuerdo con la política marítima de Carlos Mesa"),
lleva una intención aviesa bajo el manto de una supuesta hábil política
reivindicativa del mar. Del único país del que hay que rescatar el mar es de
Chile, pero eso es imposible mientras no se recupere el derecho propietario de
los hidrocarburos, para poder hablar con autoridad nosotros mismos y sin
intermediarios. Como están las cosas y cómo será la Ley de Hidrocarburos
Nogales-Mesa todo apunta a la actualización del proyecto Pacific-LNG para
exportar gas a México y los EUA y por Chile. Entretanto se pierde la oportunidad
histórica de plantear una política de integración latinoamericanista, patriótica
y realmente limitadora del papel de las transnacionales.
La pregunta 5 es la más falsaria, enrevesada a propósito y quiere forzar un
"SI". Bajo una apariencia de posibles beneficios (fondos para salud, educación,
etc) pretende ocultar que los impuestos y regalías al 50% de la producción, la
Ley Nogales -Mesa, los propone para dentro de 30 a 40 años, cuando acaso se
agoten o disminuyan notoriamente los reservas del gas y el petróleo.
Nuestra oposición a las preguntas, tal como las plantea Mesa, y nuestra
certidumbre de que están dirigidas a avalar la aprobación del proyecto de Ley de
Hidrocarburos Nogales-Mesa con los resultados del referéndum manipulado, se basa
en que el parlamento actual, dominado por la derecha neoliberal, la aprobaría
sobre tablas, pues, cuenta hasta con la miope adhesión de dirigentes y miembros
de la bancada de un MAS, emborrachado en su táctica electoralista.
En realidad, el pueblo boliviano plantea mayoritariamente, inclusive en los
departamentos del Sur y el Oriente y no por un radicalismo obcecado, la
NACIONALIZACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS. No debe haber miedo si el pueblo está
unido como estuvo cuando nacionalizó el petróleo con el Gral. Toro en 1937;
cuando nacionalizó las minas en 1952 con la Revolución de Abril y cuando
nacionalizó la Gulf Oil con el Gral. Ovando y Marcelo Quiroga Santa Cruz. Es
cierto que una medida de esta naturaleza tendrá dificultades, como las tuvieron
las anteriores nacionalizaciones. Pero también puede conseguir poderosos aliados
si se aprueba una política de integración que comenzaría por unificar las
empresas petroleras estatales sudamericanas. Así lo ha propuesto el gobierno
bolivariano de Venezuela para integrar inicialmente a Bolivia, Argentina, Brasil
y Venezuela.
El movimiento de resistencia contra la política neoliberal y sobre todo la
petrolera, incluida la huelga general decretada por la COB ha cumplido una etapa
de su desarrollo. La continuación de la resistencia al gobierno neoliberal
requiere, reacondicionando algunas de sus medidas, la adopción de tácticas,
propias de la larga experiencia de lucha de los trabajadores que no se agota en
la huelga general. En consecuencia, planteamos al pueblo de Bolivia mantener y
fortalecer una actitud firme, de rechazo al referéndum con las actuales
preguntas tramposas y tergiversadoras de la voluntad popular. Si acaso el
gobierno y sus aliados persistieran en imponer su engaño, el pueblo se reserva
el derecho de boicotear el referéndum y desconocer sus resultados. Los
procedimientos de la agitación y la propaganda son muchos. Van desde las
asambleas en los sindicatos, en la juntas de vecinos, en los clubes y
asociaciones culturales; propaganda mediante volantes y otras publicaciones;
rayados murales, recolección de firmas; utilización de espacios radiales y
televisivos y en la prensa democráticas hasta las manifestaciones y las marchas.
En todos estos espacios deberán difundirse los objetivos nacionales y populares
de: RESCATE DEL DERECHO PROPIETARIO, AHORA; DEL FORTALECIMIENTO DE YPFB CON LA
PLENITUD DE SUS FACULTADES Y LA EXCLUSIVIDAD EN LA COMERCIALIZAZCIÓN DE LOS
HIDROCARBUROS; LA REVISIÓN DE LOS CONTRATOS CON LAS TRANSNACIONALES PETROLERAS;
LA INDUSTRIALIZACIÓN DEL GAS EN TERRITORIO NACIONAL PRIORITARIAMENTE Y LA
SATISFACCIÓN DE LAS NECESIDADES DEL CONSUMO NACIONAL. TODO PROYECTO DE
EXPOTACIÓN DEBE ESTAR LIGADO A LA INDUSTRIALIZACIÓN, EN TODAS SUS FASES. EN CASO
DE RESISTENCIA DE LAS TRANSNACIONALES, A REVISAR LOS CONTRATOS Y A CUMPLIR CON
SUS OBLIGACIONES TRIBUTARIAS HONRADA Y ADECUADAMENTE, PASAR DIRECTAMENTE A LA
NACIONALIZACIÓN DE LOS HIDOCARBUROS. UNA VEZ RECUPERADO EL DERECHO PROPIETARIO
DEL GAS EXPOTARLO A QUIEN NOS PAGUE MEJOR, INCLUSO A CHILE SI ESTE PAÍS
RESTITUYE A BOLIVIA SUS DERECHOS SOBRE EL MAR. INTERNACIONALMENTE TRABAJAR EN
LOS OBJETIVOS DE UNA POLÍTICA DE INTEGRACIÓN LATINOAMERICANISTA Y DE DEFENSA
MUTUA DE LOS INTERESES NACIONALES FRENTE A LAS TRANSNACIONALES Y EL IMPERIALISMO
EXPANSIONISTAS.
En caso de no modificarse el tenor de las preguntas de Mesa para el referéndum,
escribir en la papeleta: una sola palabra y consigna: NACIONALIZACIÓN.
La Paz, 27 de mayo del 2004.
Por la Dirección Nacional del Partido Comunista de Bolivia
Marcos Domich
Primer Secretario del Comité Central