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Latinoamérica

18 de enero del 2004

Entrevista a la comandancia del Ejército de Liberación Nacional de Colombia- ELN
"Estamos abiertos al diálogo con la sociedad y rechazamos la propuesta de rendición y reinserción guerrillera que el régimen presenta como ofertas de paz"

Luis Carlos Cárdenas
Sistema Informativo Patria Libre

El 2 de enero la Comandancia del ELN confirió la siguiente entrevista, vía radial, al Sistema Informativo Patria Libre "SINPAL".

P:- Comandante Nicolás. En este día de año nuevo tiene algún mensaje para la militancia, combatientes y bases del ELN?

R:- Nicolás: Por supuesto. Queridos compañeros y compañeras, a nombre del Comando Central del ELN les damos este saludo de año nuevo. En él les expresamos nuestros afectos a todas las compañeras y compañeros de la base social en los campos y ciudades, los hacemos hoy presentes y los llamamos de nuevo a seguir resistiendo las medidas guerreristas del gobierno que aplica la formula de "quitarle el agua al pez", como es la usanza de sus amos gringos.

A nuestros lisiados de guerra a quienes el enemigo o sus esfuerzos por combatir, les afectaron su cuerpo pero no su espíritu de incansables luchadores por la libertad.

A nuestros cuadros, militantes y combatientes presos por el enemigo y cuyos sueños de libertad están ligados a los sueños que tenemos todos por estar de nuevo reunidos y continuar la lucha.

A quienes por su trabajo, o en contra de su voluntad, están en el exterior soñando con la patria, una patria que perteneciéndoles no pueden recorrerla ni luchar en ella.

Saludo también a todos los combatientes, de nuestra Organización, a esa juventud impetuosa, que ocupa las trincheras y permite con su acción en el combate, la producción, el entrenamiento y reentrenamiento, que nosotros dediquemos el esfuerzo diario a las labores de conducción.

A los militantes elenos, semillero de los futuros conductores, en cuyo espíritu se alimenta la sabiduría y el don de interpretar correctamente las líneas de dirección política e ideológica emanadas de nuestra democracia.

Mi saludo a todas y todos los que me acompañan en la conducción del ELN en los diversos niveles jerárquicos y con quienes compartimos la responsabilidad de conducir esta fuerza guerrillera, probada y aguerrida en casi 40 años de acción revolucionaria.

Por último, el saludo y homenaje a todos los caídos, a nuestros mejores maestros en esta briega y ante quienes nos inclinamos para seguirles reconociendo su grandeza. A todos ellos vamos a dar un fuerte aplauso.

El año que comienza está cargado de expectativas, unas halagadoras y otras de preocupaciones, ante todas ellas actuaremos con la conciencia de estar disponibles para asumirlas con responsabilidad y en ello confiamos mucho en el respaldo popular y en nuestra fuerza para salir adelante.

Así compañeros que ligados al pueblo y en nuestra consigna de ¡NI UN PASO ATRÁS, LIBERACIÓN O MUERTE!, estaremos juntos el año que comienza.

P:- Comandante Antonio García. En el campo internacional y nacional se están dando fenómenos que reflejan una corriente de búsquedas y cambio. ¿ Qué nos puede decir al respecto?

R:- Antonio. Con mucho gusto, empecemos viendo qué pasa a nivel internacional.

En la actualidad del mundo de hoy se mueven tres grandes tendencias: en la primera, vemos al imperio norteamericano luchando por recolonizar el mundo para acrecentar la expoliación y explotación de los pueblos. En la segunda, está la lucha de los explotados y pueblos del mundo por construir un proyecto humano y la tercera, que busca mediar entre las dos anteriores, y que en últimas pretende dejar las cosas como están. Nosotros estamos por el proyecto humano, que reivindique al hombre en su integridad.

En el año que pasó, el curso de estas tendencias marcó derroteros importantes a tener en cuenta a la hora de analizar los acontecimientos y de proyectar nuestra lucha.

La implementación del neoliberalismo en América Latina, y en particular en Sur América, acrecentó significativamente las crisis sociales acumuladas en nuestras sociedades y las hizo colapsar. El modelo de dominación hizo crisis, las masas se desencantaron de los partidos políticos gobernantes y a través de la lucha y la protesta se dio nacimiento a las nuevas alternativas.

Grandes movimientos de masas a través de la lucha y la movilización han derrotado gobiernos neoliberales, colocando en crisis la vieja manera de gobernar y han abierto las puertas para que nuevas alianzas sociales por la vía electoral accedan al ejercicio de gobernar. Las clases dominantes no se dan por vencidas y se atornillan con todos los recursos al poder. El panorama político latinoamericano ha cambiado sustancialmente, las burguesías perdieron la hegemonía y hoy existen otros protagonistas que se la disputan.

Los triunfos electorales no significan que ya existan revoluciones victoriosas, sino que los de arriba ya no pueden gobernar como antes y que ese vacío está siendo ocupado por otras fuerzas sociales y políticas. Se vive un momento importante en la toma de conciencia de las masas, se ha avanzado en la unidad de las fuerzas populares, pero aún falta la acumulación de fuerzas necesaria que permita cambiar la vieja institucionalidad y construir la nueva, y donde existe la nueva, como en Venezuela, la implementación de las transformaciones sociales se abrirán camino con unidad de las fuerzas populares y con la movilización de masas tal como ha acontecido en la defensa del gobierno bolivariano.

Como expresión de la nueva realidad de América Latina, en el 2003, Lula asume la presidencia en Brasil, las opciones y luchas de las masas en Argentina y Ecuador, se agudiza la crisis política y social en el Perú, la movilización de masas en Bolivia hace caer un presidente y en Venezuela continúan ganándoles terreno a los golpistas.

P:- Y dentro de este contexto, ¿cómo está viendo el ELN la situación colombiana y cuáles son las perspectivas?

R:- En este contexto Colombia sigue siendo la esperanza de los Estados Unidos para recuperar nuevamente al continente para su redil. El conflicto colombiano es el comodín para la política de EE. UU., ya que se convierte en la justificación de la intervención militar en el área para sabotear y desestabilizar los procesos que acontecen en las fronteras colombianas.

Derrotar a la insurgencia y recomponer el modelo de dominación es la tarea de Uribe, para hacerlo extensivo al resto del continente. Es una especie de cabeza de playa de los gringos en el continente.

La manera como Uribe llegó a la presidencia y cómo organizó su gobierno, no fue otra que la destrucción y desorganización de los partidos tradicionales, para abrirle paso a su pretendido partido político buscando constituirse en la fuerza política hegemónica que viabilizara la reelección y la continuidad de su plan contrainsurgente hasta lograr la derrota de la insurgencia y rendir al país al dictamen del neoliberalismo internacional.

El drama social acumulado desde la década pasada y profundizado con las medidas antipopulares de ajuste neoliberal que Uribe necesita para destinar recursos a la guerra, hizo posible la convergencia de sectores sociales populares y democráticos. De otro lado se agudizaron las contradicciones en el seno de los partidos tradicionales por la impositiva y excluyente manera de gobernar, por la excesiva concentración de poder en sus manos que, sustentado en la aureola de considerarse intocable por haber ganado en la primera vuelta, sin darse cuenta labró su propia derrota en las jornadas electorales del 25 y 26 de octubre pasado.

Con las dos consecutivas derrotas electorales de Uribe, se manifiesta el nacimiento de una alternativa política diferente a los partidos tradicionales, producto de la convergencia de sectores de izquierda y democráticos, con sectores del partido liberal que encarnan una expresión comprometida con un proyecto social. La abstención en el referendo se ganó por las contradicciones en el seno del liberalismo y las elecciones del 26 de octubre por la confluencia de los sectores sociales de carácter popular y democrático.

El haber ganado las elecciones en las seis principales ciudades del país, es un acontecimiento sin precedentes en la historia política de Colombia, que modifica sustancialmente el mapa político, que evidencia la crisis de gobernabilidad del régimen y que ha surgido una opción con la que las mayorías se identifican. Podríamos decir que en nuestro país, también, la gobernabilidad local y regional es una manera de acumular para un proyecto de transformación social.

P:- El Presidente Uribe está negociando con una parte del paramilitarismo liderado por Carlos Castaño, Salvador Mancuso y Adolfo Paz, ¿cuál es la postura del ELN sobre este mal denominado "proceso de paz"?

R: Antonio- En las zonas paramilitares que están siendo aseguradas militarmente por el ejército ya es innecesaria la existencia del paramilitarismo como fuerza de "seguridad regional", por eso se lanzaron a un recambio, apoyando a candidatos de derecha e intimidando a la población para que votara por ellos. Se trata entonces de reconvertir su presencia militar en fuerza política para consolidar su poder a través de las administraciones locales. Igual estrategia siguieron en los contornos de las zonas de influencia guerrillera, donde son apoyados por el ejército y la policía.

Dentro de esta realidad el establecimiento pretende, con su manido esquema de reinserción, madurar su proyecto político de derecha. La fuerza paramilitar liberada será legalizada para su reubicación en otras zonas o funciones.

Debe ser de alta preocupación para el gobierno guerrerista y paramilitar, el evidenciar que mientras sus huestes ganaban en las zonas periféricas, las mayorías colombianas derrotaron a los candidatos uribistas en las seis principales ciudades del país.

Ante la modernización de la maquinaria de guerra del Estado, los paramilitares quedaron siendo un aparato atrasado y obsoleto, que al entrar en un agudo proceso de descomposición y bandidaje son factor de deslegitimación del establecimiento. Y cuando la política del Estado se identifica plenamente con el ideario paramilitar, es un proyecto que está sufriendo un ajuste en correspondencia con su estrategia. Por eso se dan las desmovilizaciones para legalizarlos, pues el Estado no puede cometer la torpeza de enfrentarse a sí mismo.

Como las masacres y el genocidio encuentran un rechazo en la opinión nacional e internacional, que tanto paramilitares como el gobierno tienen que pagar un alto costo político, el gobierno ahora prioriza las detenciones masivas de luchadores sociales buscando recluirlos en las prisiones a través de los juicios amañados que monta la fiscalía.

Por otro lado, ante la certeza que bajo el nuevo contexto político la desmovilización implicaría la extradición de sus jefes hacia Estados Unidos o el retiro en todo caso fuera del país. Como podemos ver el gobierno debe enfrentar una doble reacción, pues los paramilitares desean una legalización donde reine la impunidad y si esto acontece el país y la comunidad internacional cuestionarán seriamente tal violación de la legislación internacional.

Este recambio del paramilitarismo, a través de la "desmovilización", apunta hacia la legalización de su violencia y su guerrerismo y pretende adueñarse de la paz para hacer la guerra. Por eso es tan importante rescatar de manera decidida la bandera de la paz con una óptica de nación.

Y para finalizar, ¿qué interpretación hace el ELN del fenómeno electoral del mes de octubre pasado?

R:- Con las derrotas que sufre Uribe se hace evidente que existe en el país un rechazo a su política de guerra, a las medidas antipopulares, al neoliberalismo, y que la confluencia de fuerzas en el campo popular y democrático apuntan hacia buscar la paz de Colombia, la democracia, la justicia social y la soberanía nacional.

P:- Comandante Pablo Beltrán. Varios sectores de opinión vienen afirmando que se constituyó un nuevo mapa político en las últimas elecciones. ¿Qué nos puede decir al respecto?

R.- Pablo.- Como acaba exponer el comandante Antonio, el régimen está haciendo cambios en su modelo de dominación para presentar una mayor apariencia de legalidad, tales como permitir espacios de oposición, la reconversión de sus fuerzas represivas ilegales y el atezamiento de los compromisos internacionales que sujetan a Colombia al servicio de los intereses estadounidenses. A la vez que busca reducir al máximo el peso de la guerrilla en la decisión de los destinos del país.

Hay un nuevo mapa político, pero el gobierno intensifica la guerra y afila instrumentos represivos contra la población civil como el estatuto antiterrorista que acaba de aprobar el Congreso. ¿Cómo enfrenta el ELN esta nueva realidad tan compleja y en especial los planes para destruir y aislar políticamente a la insurgencia?

R:- Nosotros, como insurgencia, hemos enfrentado el plan enemigo en el año que pasó, al tiempo que nos seguimos adecuando internamente para liderar la lucha en todos los campos de la acción revolucionaria.

La ofensiva integral de la oligarquía contra las guerrillas ha buscado aislarlas y a su vez ganarse a la población para su lado, además trata de recuperar control territorial y de imponer una asfixia económica y logística a la insurgencia. Este pulso se va a inclinar del lado del bando que gane mayor apoyo de la población.

La disputa del apoyo de la sociedad para uno u otro bando está por clarificarse aún, pues si bien es creciente el rechazo al proyecto autoritario del régimen, esto no implica necesariamente que se traduzca en igual medida en apoyo a las propuestas insurgentes. A partir de los propios errores de la insurgencia, el régimen los ha explotado tratando de sacar ventaja y convertirlos en motivo de aislamiento político de las propuestas revolucionarias.

La información que el gobierno difunde al país y a la comunidad internacional es triunfalista, hace ver que la guerrilla colombiana está derrotada, aislada y sin perspectivas. ¿Qué tiene esto de cierto?

R: Hace parte de la campaña de desinformación mediática que busca confundir y desmoralizar las fuerzas que propugnan por los cambios y la construcción del nuevo país. Pero además para justificar los gastos ante quienes financian la guerra.

Afortunadamente con anterioridad nos preparamos para contrarrestar la ofensiva contrainsurgente y para consolidar elementos internos que traemos flojos, para estos propósitos fueron de suma utilidad tanto la Escuela Superior de Guerra, como la Quinta Escuela Nacional de Cuadros.

En todos los operativos militares contra las zonas de influencia revolucionaria la respuesta de guerra de guerrillas les ha negado los éxitos que ellos esperaban, las organizaciones insurgentes han sabido cubrir sus fuerzas y se mantienen en todos sus territorios tradicionales. Los bloqueos a las zonas están siendo quebrados por medio del despliegue guerrillero en territorios más amplios.

El gran afectado con estos bloqueos sigue siendo el pueblo, quien sigue acudiendo al desplazamiento como medida principal de supervivencia.

Acudo a un ejemplo, el de la "Operación Allende Vive" que acabamos de concluir exitosamente en la Sierra Nevada, allí quedó evidente el fracaso militar del ejército gubernamental que se la jugó a fondo para rescatar a los turistas extranjeros a sangre y fuego. Hoy la opinión se pregunta, ¿cuál es la efectividad de los miles de millones que la oligarquía invierte para escalar la guerra?

Además pudimos informar al mundo sobre la crisis humanitaria que sufre Colombia por cuenta del régimen y se llamó la atención sobre la agudización de la crisis del país, como resultado del plan de guerra que imponen los estadounidenses.

La comparación de los costos políticos y económicos de lo que invierte el gobierno en el pulso actual, da cuenta de lo precario de los resultados que muestra hasta ahora el escalamiento de la guerra comandado por los estadounidenses. Ni en lo político, ni en lo económico, ni en lo militar el régimen puede sostener y prolongar la intensidad del esfuerzo ofensivo que realizó el año anterior.

Podemos decir que hoy en día, nosotros, el Ejército de Liberación Nacional, avanzamos en lograr reconocimiento como alternativa revolucionaria que lucha por un nuevo país. La opinión ahora es más consciente de que puede contar con nosotros para construir salidas a la crisis de Colombia, y que para ello estamos abiertos al diálogo con la sociedad, al tiempo que rechazamos la propuesta de rendición y reinserción guerrillera que el régimen quiere presentar como ofertas de paz.

El ELN reiteradamente ha planteado que la Unidad es un elemento estratégico para la revolución colombiana, se conoce que se adelantan conversaciones con las FARC, ¿Nos puede informar qué actividades unitarias se adelantan con otras organizaciones populares que buscan igualmente los cambios?

R:- Con los compañeros de las FARC-EP venimos conversando. En este nuevo año continuaremos buscando coordinación y cooperación con las FARC y con las demás organizaciones populares para seguir enfrentando la estrategia estadounidense contra el pueblo de Colombia. Además seguiremos tomando medidas internas que nos habiliten para cumplir bien nuestro papel de estar junto al pueblo en todas las luchas por la liberación definitiva.

También consideramos de gran importancia estrechar los vínculos de hermandad y acordar planes de lucha con otras organizaciones revolucionarias de América Latina, retomando el pensamiento de Bolívar y el Che.

Para finalizar quiero decir que en el ELN somos convencidos que se requiere y sabremos construir la unidad del pueblo y de los revolucionarios, para con la lucha abrirle paso a los sueños de paz y de la Nueva Colombia que abrigamos todos.

P:- Comandante Oscar Santos. La prensa colombiana está informando de operaciones en el Sur de Bolívar contra los paramilitares. ¿Nos puede confirmar la información y darnos los resultados?

R:- Oscar. La información es real, es otra operación contra las bandas mercenarias acantonadas en el Sur de Bolívar. Justamente a un año de la de Cerro Azul, donde se destruyó totalmente la base paramilitar ubicada en ese corregimiento y resultaron muertos 80 mercenarios y muchos otros heridos.

Los mandos del Área reportan que el día martes, 30 de diciembre del 2003 a las 02:30 horas, unidades conjuntas del Área Darío Ramírez Castro del Ejército de Liberación Nacional y el Bloque del Magdalena Medio de las FARC-EP asaltaron la base paramilitar acantonada en el corregimiento de POZO AZUL, municipio San Pablo, Sur de Bolívar.

Nos puede informar ¿cuales son los resultados de la operación?

R.- Con mucho gusto. La base quedó destruida, resultaron 40 paramilitares muertos y un número indeterminado de heridos.

Se recuperó un importante arsenal compuesto: por 22 fusiles, un mortero 60 milímetros, un MGL múltiple, un M79, una pistola 45, un revólver 38, una cadena de PKM, una granada de mortero, una cantidad grande de munición, varios equipos con información.

En el mismo día a las 09:00 horas, unidades conjuntas interceptaron a una fuerza paramilitar, que venía de refuerzo, en el sitio La YE de La Humareda del corregimiento de MONTERREY, municipio de Simití. Se combatió en campo abierto durante varias horas. En esta acción perdieron la vida 20 mercenarios.

Decía Ud. que el operativo fue conjunto, pero alguna prensa registra como si la acción fuera solo de las FARC. ¿Cómo se puede interpretar esa versión, ignorancia o desinformación para confundir?

R.- Hace parte del manejo de la propaganda oficial dirigida a ignorar la capacidad militar del ELN y hacer creer que no existimos o estamos tan débiles que el único recurso que nos queda es acogernos a la propuesta de rendición del gobierno de Uribe.

En el Sur de Bolívar hay unas relaciones históricas de respeto y apoyo entre el ELN y Las FARC que facilitaron construir un nivel de confianza entre las fuerzas y poder realizar operaciones conjuntas de envergadura para responder a los planes de las V Brigada del Ejército y los paramilitares en el Sur de bolívar.

En las acciones conjuntas el ELN y las FARC ponen igual número de hombres y armas con sus respectivos mandos, acordando un mando operativo en cada tarea.

"Mas fácil se cae un mentiroso que un cojo" dice el refranero popular. Los hechos que tapan o desfiguran la propaganda oficial, hablan de por sí y muestran lo contrario.