En los últimos días, en capital federal y en el conurbano bonaerense, se han efectuado una serie de protestas de alto grado de confrontación física con las fuerzas represivas. En su mayor parte han sido desencadenadas por asesinatos a manos de policías, de personajes cercanos a la policía, o cuanto menos en un marco de connivencia policial.
El monopolio mediático -ocho grupos económicos manejan el 90% de los medios de la Argentina- han caracterizado en algunos casos un clima que denominan enrarecido, en otros una situación de anarquía o preanarquía, llamando -más o menos abiertamente- a la represión. Intentan instalar la idea de "país violento", evitando mencionar como posible motivo de tal violencia la situación de miseria en la que se encuentra la mitad de la población del país, y en un marco de la peor distribución de ingresos de los últimos treinta años según indicó un estudio oficial. En el afán de dar sustento a esta idea, las corporaciones de comunicación ponen en un mismo plano cortes de calle y rutas de diversa índole, toma de comisarías como represalia por el gatillo fácil policial, bloqueo de boleterías, toma de McDonalds, robos de autos, secuestros extorsivos, asesinatos en ocasión de robo, asesinatos políticos, asesinatos pasionales.
Han colaborado con esta interpretación las declaraciones que realizaron la semana pasada José Pampuro, ministro de Defensa, y Roberto Lavagna, de Economía, quienes dijeron que "la Argentina se está transformando en un país violento" y que era necesaria una actuación "más activa de ley", respectivamente. Por su parte, la vicegobernadora de la provincia de Buenos Aires, Graciela Giannettasio, momentáneamente a cargo del Ejecutivo provincial por el viaje de Felipe Solá, advirtió que "se pasará a retiro a todos los comisarios" que no logren contener la toma de su seccional, lo que en última instancia forzará a éstos a defender sus puestos de trabajo a los tiros. Mientras tanto, el ministro de Seguridad bonaerense, León Carlos Arslanian, declaró que "acá hay cosas raras" pretendiendo vincular el repudio popular a las comisarías con "maniobras para crear inestabilidad política".
A todas esta declaraciones se sumaron las del secretario de Asuntos Hemisféricos de los Estados Unidos, Roger Noriega, quien manifestó la preocupación del gobierno de George W. Bush por el "avance del conflicto piquetero", y diversos sectores del empresariado local, que clamaron por una feroz represión argumentando que el "actual clima de violencia" ahuyenta las inversiones extranjeras y frena la economía.

Justicia para Diego

Diego Lucena había ido a bailar al boliche "Invasión Tropical" en Isidro Casanova. El domingo 20 por la madrugada, 5 horas después días después de su desaparición, su cuerpo fue hallado sin vida a unas cuadras del lugar. Diego tenía 22 años y encontró la muerte de una forma brutal. Fue ultimado a golpes en su cráneo; su rostro se encontraba desfigurado y sus manos atadas a la espalda. Aún conservaba los 22 pesos en los bolsillos. Diego era integrante del Frente de Trabajadores Combativos (FTC). Su familiares, compañeros y amigos responsabilizan a la policía bonaerense y a los "patovicas" del boliche por esta muerte.
La reacción espontánea de sus familiares, compañeros y amigos derivó en el ataque del local bailable y la quema de un patrullero.
El último martes hubo una movilización hacia la Fiscalía de San Justo, de la que los medios masivos nuevamente destacaron incidentes. [Leer informe completo con fotos]

Asesinan al Oso

El viernes 25 por la noche fue asesinado en La Boca Martín "El Oso" Cisneros, reconocido dirigente de la Federación de Tierra y Vivinda que lidera Luis D´Elía, alineado con el gobierno nacional. Sus compañeros del Comedor Los Pibes acusaron del crimen al "Gordo" Juan Carlos Duarte, un "dealer" conocido por estar amparado y trabajar para la comisaría nº24, y a un menor de edad llamado "Luis". En el horario del asesinato la policía había liberado la zona, y luego del asesinato, demoraron más de una hora en llegar al lugar, dejando que El Oso se desangre y sus asesinos escaparan.
Ante el amparo de los delincuentes y la actitud de desconocimiento de la policía, vecinos y compañeros del militante asesinado decidieron tomar la comisaría hasta tanto no buscaran y detuvieran a los responsables. [Comunicado del Comedor Los Pibes]

Frente a la comisaría tercera de Lanús, en Valentín Alsina, vecinos e integrantes de organizaciones de desocupados reclamaron la liberación de dos mujeres militantes de la Coordinadora de Unidad Barrial - Movimiento Teresa Rodríguez (CUBa-MTR), Cecilia Díaz y Roxana Duarte.
El movimiento denunció en un comunicado que el 22 de junio pasado en Remedios de Escalada policías de la comisaría 4a. de Lanús irrumpieron en un centro popular donde se impartían clases de alfabetización con una presunta orden de detención contra un joven. Los policías -continúa el comunicado- reprimieron a los integrantes de ese centro "haciendo referencia a su condición de piqueteros" con balas de goma y golpes.
Según la policía, el joven al que se quiso detener sería hijo de Cecilia Díaz y estaría acusado de robo en banda por el intento de sustracción de un arma a un policía. El dirigente del MTR Oscar Kuperman declaró que "esa causa fue inventada por la policía y su madre fue detenida porque defendió a su hijo". [Cable de la Agencia Télam]

En la masiva movilización por el aniversario del asesinato de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, más de 50 mil personas de un amplísimo abanico de organizaciones de desocupados -desde la CCC hasta el Bloque Piquetero Nacional, pasando lógicamente por los distintos sectores de la Anibal Verón- demostraron nuevamente que en la actual coyuntura cada vez existe un mayor grado de coordinación y artículación.
Durante los dos actos realizados -uno en el Puente Pueyrredón y otro en Plaza de Mayo-, a través de la lectura de un documento único se criticó duramente el incumplimiento de la promesa presidental de investigar y abrir los archivos de la Side para investigar "hasta las últimas consecuencias" quiénes fueron los responsables del asesinato de los dos piqueteros. En la manifestación participaron sectores que hasta hace poco se mostraban más favorables a la gestión de Néstor Kirchner. Los medios de prensa taparon la masiva movilización, poniendo todo el énfasis en la "operación violencia piquetera", utilizando como caso paradigmático la toma de la comisaría de La Boca.
Ahora ante el asesinato de Martín Cisneros de la FTV, un espectro aún más amplio de organizaciones piqueteras -oficialistas y opositoras- realizaron un acuerdo para participar de forma conjunta en un acto para pedir el esclarecimiento del crimen. La jornada se realizará en la intersección de las calles Almirante Brown y Perez Galdos de La Boca, a las 15 hs. Por su parte, la CTA convocó a un paro de actividades para el mismo día.