Informe del programa El Cielo por Asalto - 4 de octubre de
2004
Sábados de 9 a 12hs - FM Klara 96.3Mhz – Comodoro Rivadavia
Escalada represiva en Caleta
Olivia con 80 detenidos
Por Marcelo García
Integrante del programa radial autogestionario El cielo
por asalto de Comodoro Rivadavia, miembro del grupo Economistas de Izquierda (EDI),
miembro del Consejo Editorial de la revista Marxismo Vivo e investigador del
Centro Regional de Estudios Económicos de la Patagonia Central (CREEPaCe).
Dirección electrónica: subrodo25@hotmail.com
El pasado sábado 2 de octubre en horas de la madrugada personal de Gendarmería y
de la policía santacruceña desalojó la nueva toma de la playa de tanques de
TERMAP en Caleta Olivia y reprimieron a los manifestantes que se encontraban
cortando la Ruta nacional número 3, en el acceso a la norteña ciudad de Santa
Cruz.
El saldo de la avanzada represora del gobierno de Sergio Acevedo y Néstor
Kirchner fueron 80 compañeros encarcelados de los cuales, al domingo 3 de
octubre, permanecían 36 detenidos en diferentes seccionales policiales de Caleta
Olivia y hasta algunos fueron trasladados a los cuarteles de Gendarmería en
Comodoro Rivadavia.
El recuento cronológico de los hechos indica que todo se inició cuando los
trabajadores desocupados, que a finales de agosto habían tomado la playa de
tanques de TERMAP, decidieron retomar el reclamo porque las petroleras y el
gobierno santacruceño no habían cumplido con los acuerdos realizados.
Los piqueteros que obtuvieron fuentes de trabajo dignas no recibieron los pagos
correspondientes al primer mes de capacitación, ni tampoco fueron incorporados a
las operadoras de la región. Fue por eso que, el lunes 27 de septiembre, un
grupo de 50 desocupados decidieron volver a protestar frente a la playa de
tanques.
Al día siguiente una avanzada piquetera trasvasó los férreos controles de
seguridad de TERMAP -que incluyen alambrados de púas como los utilizados en los
campos de concentración nazis y efectivos de seguridad privada y pública
apostados cada dos metros- y unos 10 manifestantes llegaron hasta el tanque
2016; el resto había quedado en las puertas de la paya de tanques y decidieron
cortar la Ruta 3.
A lo largo de casi todo el miércoles y el jueves estuvo funcionando el sistema
de seguridad contra incendios que incluye el lanzamiento constante de un
fortísimo chorro de agua que golpeo incesantemente a los piqueteros que estaban
dentro y fuera de TERMAP.
En aquella ocasión la violencia llegó hasta los trabajadores de prensa que se
encontraban cubriendo las alternativas de la protesta. La intencionalidad de la
agresión a los periodistas quedó de manifiesto cuando uno de los custodios que
accionaba el chorro de agua les gritó a los periodistas que "para ustedes
también hay".
En la madrugada del sábado hicieron nuevamente su aparición los gendarmes
"privados", ya que el cuerpo especializado en represión que arribó de General
Hacha (La Pampa) es solventado económicamente por las petroleras
multinacionales, que dispersaron brutalmente a los piqueteros.
El saldo fueron casi un centenar de trabajadores desocupados encarcelados en
distintos puntos de la región norte de Santa Cruz y algunos otros que fueron
trasladados hasta el destacamento de Gendarmería ubicado en Comodoro Rivadavia,
porque a ellos se los acusaba de haber cortado la ruta y así se reflotó el tan
mentado artículo 194 del Código Penal.
Al concluir el fin de semana sólo quedaban detenidos una veintena de compañeros
que habían sido encarcelados en la localidad de Cañadón Seco. Ellos se suman a
los seis presos que ya llevan un mes de encarcelamiento.
Como si todo esto fuera poco una de las compañeras detenidas denunció a través
de la diputada nacional Patricia Walsh que fue encapuchada y amenazada de
violación por personal de la seccional cuarta de Caleta Olivia.
Existen algunos datos estadísticos de la industria petrolera que opera en la
Cuenca del Golfo San Jorge (sur de Chubut y norte de Santa Cruz) que son
absolutamente contundentes.
Si se compara la producción petrolera de los últimos dos años se puede verificar
que la cantidad de crudo extraído se incrementó desde enero de 2002 hasta junio
de 2004 en un 18% en Chubut y en un Santa Cruz se redujo en un 15% debido
fundamentalmente a un cambio del patrón extractivo de la cuenca pero también las
diferentes protestas protagonizadas en la zona.
Ahora si lo que se mide es el valor que han tenido esos niveles de producción se
debe afirmar que, en el mismo período antes mencionado, el valor de la
producción petrolera chubutense creció en un 352% y en un 303% en el norte
santacruceño.
Existen algunos números de gran cantidad de dígitos que muestran la contundencia
de estas cifras. En año 2002 el valor de la producción petrolera santacruceña
significó 3.082.844.733pesos y la chubutense fue de 3.148.994.327 pesos. En el
2003 ascendió a 3.593.738.313 y a 3.915.283.824 pesos respectivamente. En el
primer semestre de 2004 los guarismos ascendieron a 1.795.685.253 pesos en Santa
Cruz y a 2.259.683.906 en Chubut, lo que de mantenerse en la segunda mitad del
año podría llevar esos guarismos totalizadores del 2004 a niveles similares en
la zona santacruceña y a 4.519.367.812 pesos en la región chubutense.
Estas ganancias netas tan abultadas se deben a varios factores. Por un lado se
debe mencionar que el sur chubutense es la región del país donde se han
focalizado los mayores esfuerzos productivos de las multinacionales, en
particular Repsol-YPF y Panamerican Energy.
Por otro lado existen dos variables que facilitaron el abultamiento de los
bolsillos de las petroleras, una está relacionada ruptura de la paridad entre el
peso y el dólar a principios del 2002 y la está estrechamente vinculada al
imparable aumento del precio internacional del petróleo que ya se estableció en
los 50 dólares por barril.
Ante la contundencia de las cifras mencionadas sería casi irrisorio calcular
cuánto representan los puestos de trabajo pedidos por trabajadores desocupados
de Caleta Olivia.
Lo cierto es que los gobiernos de Kirchner y Acevedo han profundizado su
escalada represiva en un claro accionar a favor de las petroleras
multinacionales sin importarle en lo más mínimo las necesidades laborales,
alimentarias y sociales que tienen el pueblo de la región.
En Caleta Olivia se está se están experimentando los límites de la represión a
los movimientos sociales. La respuesta gubernamental en Caleta es una amenaza
para todo el movimiento piquetero nacional y para los trabajadores en general.
Del rechazo, el repudio y la movilización en contra de lo que está sucediendo en
Caleta Olivia depende que la oleada represiva se extienda a todo el país. La
unidad y la lucha serán vitales para derrotar a la "horda K