Latinoamérica

Kintto Lucas
QUITO, 24 jul (IPS)

Organizaciones sociales de Ecuador pedirán a los gobernantes de América del Sur una posición contraria al ALCA y el especial rechazo del Plan Colombia, ante la posibilidad de que el conflicto armado en ese país se extienda a la región.
El temor de una sudamericanización del Plan Colombia se instaló con fuerza en los últimos días al conocer la información de que se prepararía una operación militar multinacional contra la guerrilla colombiana en el marco de la lucha contra el narcotráfico.
La información fue difundida este domingo por el diario Jornal do Brasil de Río de Janeiro y se basa en una entrevista al coronel chileno José Miguel Pizarro, director-presidente de Red Táctica, una agencia dedicada a la negociación de armas entre Estados Unidos y América Latina, y fuentes brasileñas de defensa.
Para el líder indígena Miguel Lluco, Coordinador Nacional del Movimiento Pachakutik una intervención multinacional en Colombia puede ser el comienzo de una guerra regional de impredecibles consecuencias.
"No podemos aceptar que se involucre a Ecuador y a toda América del Sur en una intervención armada. Los presidentes sudamericanos que se reúnen este viernes y sábado en Ecuador deberían declararse contrarios a cualquier acción de ese tipo'', afirmó Lluco.
Según Pizarro, desde enero de este año, 30 oficiales de la Academia de Guerra chilena, planifican la forma de intervención en Colombia, que involucraría unos 2.600 soldados como parte de una fuerza multinacional dirigida por Estados Unidos bajo la égida de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
El militar chileno argumentó que Chile aceptaría involucrarse en esa acción si lo hacen otros cuatro países latinoamericanos, que serían Argentina, Ecuador, Uruguay y Perú.
Se espera que Argentina proporcione un batallón reforzado y Uruguay un batallón de infantería , aseguró Pizarro, y agregó que Perú no va a colaborar con un efectivo menor que el de Chile y Ecuador ya tiene fusileros navales en la frontera con Colombia .
El militar chileno aseguró al diario brasileño que si se confirma la participación de los distintos país, la acción militar podría llevarse a acabo en enero de 2004, debido a que en ese periodo los guerrilleros colombianos estarían desgastados por los continuos enfrentamientos con el ejército de su país.
También señaló la posibilidad de que muchos de los rebeldes perseguidos puedan fugar a Brasil, Ecuador, Perú y Venezuela, países fronterizos con Colombia.
Jorge Loor, dirigente de la Coordinadora Nacional Campesina, aseguró que aunque no ocurra la intervención mencionada por el diario brasileño, Ecuador ya está involucrado en el conflicto colombiano a través de la Base del Puerto de Manta, cedida a las fuerzas armadas de Estados Unidos.
El vicepresidente ecuatoriano, Pedro Pinto aseguró que no hay ningún sustento para pensar que Ecuador pueda formar parte de un ejército latinoamericano que intervenga en Colombia.
El gobierno ecuatoriano ha concedido la Base de Manta para controlar el narcotráfico y no el terrorismo, eso ha quedado claramente expuesto por el señor presidente de la república, Gustavo Noboa, y el canciller, Heinz Moeller , argumentó Pinto.
Por su parte, el vocero oficial de la presidencia, Oscar Zuloaga, aseguró que la voluntad del pueblo ecuatoriano es de no verse involucrado en el conflicto colombiano.
La resolución del conflicto armado colombiano corresponde a los colombianos y el gobierno ecuatoriano deberá tomar acciones para proteger sus fronteras y ciudadanos", aseguró Zuloaga.
Bajo esa perspectiva no se enmarca la creación ni la participación de Ecuador ni de soldados ecuatorianos en ninguna fuerza, sea de intervención o fuerza de paz que opere en el interior del territorio colombiano , arguyó el funcionario.
Loor aseguró que diversos movimientos sociales pedirán a los doce presidentes sudamericanos que participarán en la II Reunión de Presidentes de América del Sur entre viernes y sábado en Guayaquil, que se opongan al Plan Colombia y al Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
El Plan Colombia de lucha contra el narcotráfico fue instrumentado por el presidente colombiano saliente, Andrés Pastrana, con el apoyo de Estados Unidos, pero para diversos analistas es una intervención encubierta contra la guerrilla.
En junio pasado el Ministro de Defensa de Ecuador, Hugo Unda, afirmó a varios corresponsales de la prensa extranjera que desde la Base de Manta se estaban realizando acciones de inteligencia contra el narcotráfico en Colombia.
Al ser consultado si esas acciones también se realizaban contra la guerrilla, Unda afirmó que ésta era un problema político .
Consultado nuevamente sobre si él consideraba a la guerrilla como un problema político y no de narcotráfico, el ministro afirmó que ese tema era parte de un problema interno colombiano que debía ser solucionado por los colombianos y que Ecuador no debía involucrarse.
Funcionarios del Ministerio de Defensa de Brasil informaron a Jornal do Brasil que ese país apoya una solución pacífica del conflicto colombiano en lugar de una salida bélica.
Además, aseguraron que el presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, comunicará a Alvaro Uribe Vélez, mandatario electo de Colombia, su interés por mediar en una salida pacifica para Colombia.
Esa propuesta la haría durante la visita que Uribe comienza el domingo 28 a Brasilia.
Tanto el gobierno uruguayo como el chileno negaron su participación en la supuesta fuerza multinacional y aclararon que sólo participan en operaciones de paz.