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Latinoamérica

Lula afirma que su obsesión será la lucha contra pobreza y narcotráfico

El candidato del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT), el ex líder sindical Luiz Inácio Lula da Silva, manifestó el viernes que si es elegido presidente sus mayores obsesiones serán la lucha contra la pobreza y el narcotráfico.
En un debate televisado por el canal Globo a unos 80 millones de espectadores, los candidatos a la presidencia que dirimirán el domingo el voto de 115,2 millones de ciudadanos, Lula da Silva y el gobiernista José Serra, hicieron conocer sus propuestas.
Con relación a la crisis económica y social, Lula da Silva dijo ``una de mis mayores obsesiones en el gobierno será sacar a 44 millones de los 170 millones de brasileños de la pobreza absoluta´´.
Agregó que, de acuerdo con los estudios de los institutos de investigación del actual gobierno, los índices de pobreza extrema se incrementaron en Brasil los últimos 8 años, precisamente los administrados por el presidente Fernando Henrique Cardoso.
Lula también se mostró a favor de una lucha frontal contra el narcotráfico ``así Brasil tenga que utilizar a las Fuerzas Armadas para desarticular las bandas nacionales e internacionales de la droga´´, dijo.
``Si soy elegido presidente ordenaré el traslado de unidades militares a las zonas fronterizas para evitar que sean utilizadas por los narcotraficantes como un territorio libre y sin ley´´, subrayó.
Contradijo las opiniones del candidato gobiernista que consideró que la prevención y educación contra el uso de drogas es el mejor camino para eliminar al narcotráfico.
``Esa es la opción más fácil y barata, pero no solucionará ni erradicará las acciones del narcotráfico´´, señaló.
Lula enfatizó que si es elegido presidente en las elecciones del domingo impondrá un plan de seguridad ciudadana que combatirá a las organizaciones criminales, pero proporcionará a los niños y jóvenes de los suburbios oportunidades de educación y utilización del deporte en forma constructiva.
Los dos candidatos lucharán el domingo en las urnas por el voto de 115,2 millones de electores que definirán quién será su próximo presidente de la República, que sucederá en el poder al presidente Cardoso, que entregará el poder el uno de enero del 2003 después de 8 años de mandatos constitucionales