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Internacional

4 de mayo del 2002

Guerra global permanente

La economía capitalista es como una bicicleta: es estable mientras este en movimiento, cuanto mas rápido mejor, pero si se detiene se cae. Por eso, ante todas las crisis que ha ido sufriendo la solución ha sido la huida hacia delante. Esto ha supuesto intensificar las injusticias y contradicciones derivadas del sistema, lo que nunca ha supuesto un problema para aplicar las políticas de "huida", pues la decisión estaba en manos de quienes no van a sufrir las consecuencias, sino que se van a beneficiar de ellas.
Desde hace ya tiempo, se viene presintiendo un colapso del sistema en su forma actual, habiendo incluso pensadores que auguran el final de la etapa de hegemonía económica estadounidense1. Desde hace ya tiempo también, se vienen viendo medidas que parecían la preparación de una nueva huida hacia delante, como ejemplo podrían mirarse las primeras medidas de las administración Bush: ruptura del tratado de mísiles balísticos, entierro del tratado de Kyoto, relanzamiento del escudo antimisiles...
En esta situación el shock del 11S ha supuesto, básicamente, la configuración del escenario perfecto para poner a locomotora a toda maquina, arrasando a su paso instituciones que hasta ahora no estaban públicamente en entredicho, como la declaración de los derechos humanos o, paradójicamente, la mismísima OTAN.
En esta nueva huida hacia delante se ha recurrido a un viejo método, la guerra, al que se le ha introducido nuevas características. Por una parte estamos ante la primera guerra realmente mundial, puesto que todos los países del mundo han sido emplazados a posicionarse en un bando bajo amenaza de ser considerado enemigo si no es en el propio bando ("Hoy, todas las naciones deben elegir: o con nosotros o con los terroristas" G. W. Bush.) No se trata solo de palabras, tras la invasión de Afganistán los mandos militares estadounidenses han ido anunciando posibles objetivos de nuevas operaciones 2 y , de hecho, ya se han desplegado marines yanquis en Filipinas (como apoyo al ejercito filipino contra una guerrilla islámica) y en Colombia, tras la ruptura de las negociaciones, la ocupación militar del terreno de distensión y el inicio de la ofensiva actual. Por otra parte, dentro de la llamada "guerra contra el terrorismo" se están aprobando a nivel internacional legislaciones y medidas excepcionales, que vulneran gravemente las libertades civiles y los derechos humanos, de las que son auténticos símbolos la situación de los prisioneros talibanes de Guantánamo. Estas medidas se están introduciendo en los códigos penales, lo que quiere decir que no se circunscriben a un estado de guerra o de excepción, con lo que la situación de guerra se normaliza. Igualmente, las declaraciones que hablan de una guerra larga (el vicepresidente Cheney ha llegado a hablar de una guerra "que será más larga que nuestras vidas") y que aluden a la "eterna" lucha del bien y el mal, hacen pensar que se quiere hacer permanente la emergencia bélica. Por eso hablamos de Guerra Global Permanente. Podemos usar también la palabra "global" en un sentido no territorial, pues al militarizar al conjunto de la sociedad mediante las medidas de excepción, el estado de guerra engloba todos los segmentos sociales.
El Departamento de Estado norteamericano ha anunciado un presupuesto de gasto militar de dimensiones delirantes, aumentando en 40.000 millones de dólares el ya desproporcionado presupuesto militar estadounidense. Si bien semejante gasto es improbable que llegue a realizarse, pues la administración estadounidense no dispone de tanto dinero ni parece fácil que encuentren financiación, si es seguro que el gasto militar va a crecer en proporciones inauditas. En este hecho podrían encontrarse dos de las claves de esta huida hacia delante. Por una parte, se trataría de una fuerte inversión de dinero publico en la industria militar-armamentística con el objetivo de que esta reactive la economía estadounidense, cuyo crecimiento esta en franco retroceso con visos de colapso 3. Esta medida de corte keynesiano no es en absoluto sorprendente, ya que durante la década de los 80 la famosa carrera armamentística jugó el mismo papel en la política económica de la administración Reagan4. Por otra parte, en un momento en el que la economía estadounidense no parece ser capaz de seguir jugando el papel de locomotora mundial que arrastra al resto de mercados y por lo tanto de seguir siendo el centro hegemónico de la economía mundo, EEUU puede pretender conservar una posición privilegiada siendo el centro hegemónico militar del mundo. La total unilateralidad que ha desplegado en la operación contra Afganistán y el desprecio mostrado no ya ante la ONU, como ya hiciera en la Guerra del Golfo, sino ante sus propios aliados de la OTAN, hacen pensar que aunque este tratado no vaya a ser roto formalmente (ni mucho menos ), EEUU quiere dejar claro que ellos son los únicos guardaespaldas de los capitales en todo el mundo, capaces de intervenir donde les de la gana, sin que haya fuerza capaz de hacerles frente.
Además, no es casual la elección de Afganistán como primer enemigo, pues los EEUU tienen unos intereses geoestratégicos muy claros en la región: controlar las rutas que permiten exportar las enormes reservas de petróleo y gas de Asia central e imponer sus bases militares en el centro de Asia. De hecho, EEUU ya tenia intención de intervenir militarmente en Afganistán antes del 11S5. Intereses similares se pueden encontrar en los otros objetivos que se barajan para continuar la guerra.
Por último, la Guerra Global Permanente configura un nuevo escenario político que les era muy necesario, pues la situación de crisis e inestabilidad esta haciendo que las tensiones sociales y políticas se disparen. En estado de guerra los conflictos son fáciles de solucionar para los poderosos: quien no esta conmigo es un enemigo, o un traidor a sueldo del enemigo. La "doctrina de seguridad nacional" que entre los 70 y 80 sembró América Latina de dictaduras militares y terrorismo de estado, se pretende aplicar ahora a nivel mundial6.
Tal y como se ha desarrollado esta guerra hasta el momento, podemos distinguir claramente al menos tres frentes de guerra. En primer lugar, el propiamente bélico, del que los bombardeos y la invasión de Afganistán serian el mas claro exponente. En segundo lugar, el legistalivo- represivo, en el que destacan la Patriot Act estadounidense y las medidas antiterroristas que se están desarrollando en el seno de la UE (que, por cierto, se empezaron a discutir antes del 11S). Y por ultimo, el informativo-propagandístico; dentro de este último llama la atención una información aparecida en El País el 19 de febrero de 2002 cuyo titular anunciaba la creación por parte del Pentágono de un gabinete que tendría la función especifica y explicita de intoxicar a la prensa de todo el mundo para influir a favor de EEUU, tras lo cual, ni el periodista que firmaba la crónica ni ningún otro ha dado a entender que deje de considerar al Pentágono como una fuente creíble.
K. activista del MRG (madriz)
Notas:
1 Véase, por ejemplo, "Crisis sistémicas, movimientos antisistémicos y lucha de clases" de Giovanni Arrighi y Beverly J. Silver en Desobediencia Global n° 1
2 Poco después de la operación contra Afganistán, una de los posibles objetivos que se barajaron fue Yemen, donde el 12 de octubre de 2000 una guerrilla islámica lanzó una zodiac- bomba contra un buque de la marina estadounidense y estuvo a punto de hundirla. Para demostrar que no eran en absoluto "tibios" con los terroristas, el ejercito de Yemen anunció que iba a comenzar a bombardear a su propia población (presuntas bases de la guerrilla... ) Muy pocos días después de este anuncio, el 18 y 19 de diciembre de 2001, el ejercito yemení atacó con tanques y helicópteros aldeas del norte del país donde "supuestamente cobijaban a presunto integrantes de la red terrorista Al Qaeda" (sic). Este ataque causó 25 muertes según Estrella Digital y 12 según El País, siendo poquísima la información que se ha hecho publica al respecto.
3 Con la Guerra Global Permanente ya desatada, las economías del Centro han tenido una pequeña recuperación que ha servido para que anuncien "el fin de la crisis". Si bien el colapso puede ser retardado, el ciclo actual esta terminando y difícilmente podrá ser alargado mas de un lustro. Parece inevitable que tras esto, el sistema tenga que reinventarse ( cambiarlo todo para que no cambie nada) adoptando un nuevo modelo, aunque sea un cambio en dirección contraria a lo que algunos esperamos, ( me refiero a lo que esperamos de ellos, sin duda que será contrario a lo que deseamos, pues ese otro cambio solo podemos conseguirlo imponiéndoselo).
4 Durante aquella época fue constante la inversión de dinero publico en la industria militar y armamentística privada, con un doble objetivo. Por una parte se obligaba al bloque del Este a destinar fuertes sumas de dinero en armas en vez de mejorar las condiciones de vida de sus ciudadanos, mientras que en Occidente esas mismas fuertes sumas de dinero servían para revitalizar la economía. Buen ejemplo de ello han sido las inversiones en investigación militar que han desarrollado productos con multitud de aplicaciones civiles y comerciales, como Internet o el tejido "gore tex" que fue investigado por la NASA.
5 El 18 de septiembre de 2001 Niaz Naïk, ex ministro paquistaní de asuntos exteriores, declaró a la BBC que ya a finales de julio "funcionarios norteamericanos le habían hablado de un plan norteamericano cuyo objetivo era lanzar una acción militar para derrocar al régimen talibán e instalar en su lugar un gobierno de afganos "moderados". Eso se haría a partir de bases situadas en Tayikistán donde ya estaban los consejeros norteamericanos. Me declararon que si se mantenía la acción, tendría lugar antes de las nieves, a más tardar a mediados de octubre". Citado por Michel Collon en "La guerra global ha comenzado", Sediciones n° 19 ed. Hiru.
6 "La lucha contra el terrorismo se ha descrito en primer lugar como la lucha contra una plaga, un cáncer propagado por los bárbaros, "por depravados opuestos a la propia civilización". [ ... ] Sin embargo, las palabras que acabo de citar, se remontar a hace 20 años. Eran las del presidente Reagan y de su secretario de Estado. La administración Reagan entró en funcionamiento hace veinte años declarando que la guerra contra el terrorismo ocuparía el centro de nuestra política exterior y utilizando términos del tipo de los que acabo de mencionar." Noam Chomsky en "La nueva guerra contra el terror", Sediciones n° 19 ed. Hiru.