La Lucha continúa

RESULTÓ ABSUELTO RAÚL CASTELLS

Este martes 16 de Abril, el Juzgado en lo Correccional N° 4 a cargo del Dr. Francisco Ponte, absolvió a Raúl Castells (dirigente del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados - MIJD) en un juicio por causas originadas en 1995. La defensa fue ejercida por la Dra. Ivana Dal Bianco, del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) y Jorge Ceballos de Barrios de Pie.
Estuvieron presentes, entre otros, el Diputado Nacional Luis Zamora, Julio Piumato de la CGT Moyano y Ariel Basteiro de la CTA, la legisladora Vilma Ripoll, así como dirigentes de los partidos de izquierda como José Montes del PTS.
La absolución se vivió como un triunfo popular, porque cuando es perseguido un luchador, en ese acto se está poniendo en el banquillo de los acusados a todos los que luchan, a todas las manifestaciones populares, a todos los trabajadores que pelean por sus derechos, por su trabajo y su alimento.
Sin embargo, Castells, continuará detenido -con prisión domiciliaria- por reclamar alimentos a la Municipalidad de Lomas de Zamora el 13 de junio del 2001.
La acusación. Una vez más, Castells debió comparecer frente a la justicia, acusado esta vez por los delitos de daño en concurso real con resistencia a la autoridad y entorpecimiento de la circulación de vehículos. Los hechos imputados tienen su origen en 1995, por los reclamos de los jubilados frente al PAMI y el Ministerio de Trabajo. El primer hecho (calificado como daño) es haber escrito "Cavallo asesino de jubilados" con aerosol. La segunda causa es por resistencia a la autoridad durante una movilización. La tercera es por corte de calle frente al Ministerio de Trabajo.
El juicio. A las 9 hs. de una lluviosa mañana, el juez dispuso la sala más pequeña de todo el edificio, no se permitieron ni cámaras ni grabadores. Raúl Castells contestó de pie las preguntas de rigor: "Nunca nos sentamos en el banquillo de los acusados".
Los testigos, en su mayoría policías, uno a uno declararon que "no recordaban nada", a pesar de que sus testimonios fueron el sustento de estas causas durante 7 años!.
Raúl volvió a convertir el estrado en una tribuna. Contó que reclamaban por pensiones graciables de $ 101,75 para los mayores de 70 años. Denunció a viva voz que mientras le negaban a los abuelos ese beneficio, se dejaba que los diputados otorguen pensiones a discreción. "El Estado, gritó Castells, protegió y fomentó a toda esa banda de delincuentes".
Luego arremetió contra la acusación por las pintadas. "Si, dijimos que Cavallo es un ladrón para los jubilados. En este país se mueren 10.000 jubilados por año y él fue uno de los que les robó la vida, así que sí, lo dijimos nosotros, como dijimos que el gobierno de Menem, el de De la Rúa, el de Duhalde fueron y son una porquería". Se explayó contra el rosario de corrupción que había en el PAMI durante la gestión de Menem, sin que ello haya arrojado un sólo preso.
Sobre del cargo de haber intentado saltar la valla de Ministerio, dijo: "nosotros queremos entrar a la casa de gobierno, y queremos gobernar, pero vamos a entrar de la mano de millones de obreros, campesinos y jubilados".
"Este no es un juicio contra mí, es un juicio contra millones de personas a las que le robaron todo, pero la ley es como la víbora, que pica solamente a los descalzos. Nosotros estamos cansados de que nos metan presos; escuchen esa lluvia, y escuchen a esas miles de personas que están ahí afuera. Nosotros no nos sentamos acá, porque en este banquillo se tienen que sentar ellos, los que nos robaron. Todas las causas que tenemos son por causas populares. No sabe que orgullo que se siente venir acá y acusar al Estado. Yo soy socialista y revolucionario y estoy orgulloso de ser marxista, estoy orgulloso de nuestra lucha".
El fiscal terminó no haciendo ningún tipo de cargo y el juez anunció que, no habiendo cargos, el acusado estaba absuelto.
La doctora Ivana Dal Bianco, disparó: "todo derecho en la tierra, fue conseguido a costa de la lucha". Agregó que los delitos prescribieron no solo por el paso del tiempo sino porque el pueblo hizo suyas esas reivindicaciones, legitimó e incorporó masivamente esos medios de lucha, porque la movilización popular echó a De la Rúa y Cavallo por hundir en el hambre y la desocupación a millones. Nadie puede ser juzgado seriamente por decirle asesinos a quienes dejaron más de 30 muertos en su sangrienta retirada".
En la calle la multitud se agolpaba bajo la lluvia, tras el vallado policial. Varios, ilusionados, pensaron que Raúl podría ser liberado. Pero continuará detenido por haber reclamado alimentos en la municipalidad de Lomas de Zamora del frepasista Di Dio.
Castells mientras tanto, espera, se prepara y lucha desde su prisión domiciliaria