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Argentina: La lucha continúa

LA PATOTA POLICIAL- PATRONAL CONTRA LOS TRABAJADORES DE BRUKMAN
(Fotos: Indymedia Argentina)

Domingo por la mañana, tempranito. Mientras el músculo duerme, la patota no descansa...
Siempre "al servicio de la comunidad", (léase: cuidarle el culo a los ricos y los poderosos), la mayor banda de delincuentes argentinos, que suele vestir de azul, aunque esta vez se hicieron presentes muchos de civil, tomó por asalto a la empresa textil Brukman, en la calle Jujuy 574, de la ciudad de Buenos Aires.

Esta empresa, a la que sus patrones abandonaron hace ya casi un año, es una de las que hoy siguen produciendo, pero esta vez dirigidas por sus propios obreros. Hoy, los hermanitos Brukman volvieron a su antiguo feudo, a recuperar algunos papeles que parece les interesaban. Y, cagones como todo burgués, se hicieron acompañar de un pequeño ejército que les cuidaba las espaldas y un poquito más abajo... 
Cientos de efectivos de civil y de uniforme, patrulleros, carros de asalto, camiones de bomberos, guardia de infantería (las famosas “tortugas ninja”) para entrar violentamente en este territorio hoy liberado de la explotación que es Brukman en manos de sus trabajadores. 
El odio de clase puede más que las leyes que ellos mismos dictan, y los jueces que ellos mismos ponen.

Sin orden de allanamiento, una gran patota de uniformados, antiguos capataces (y eternos alcahuetes), entró violentamente, golpeando trabajadoras, (incluso un niño de corta edad), rompiendo máquinas, moldes, robándose el disco rígido de una computadora que los trabajadores usan para los diseños de los moldes, y destrozando todo, también se robaron una cantidad de carpetas guardadas en una oficina, y partieron tan violentamente como llegaron, deteniendo a seis compañeros.

Este allanamiento-intento de desalojo fue resistido por los trabajadores, y apoyado por vecinos, Asambleas Populares, partidos de izquierda, piqueteros, y las Madres de Plaza de Mayo. 
Sobre el mediodía, la multitud reunida sobre la calle Jujuy al 500 saludó la llegada de los compañeros que hacía pocos minutos habían sido dejados en libertad, luego de varias horas de ilegal detención en dependencias de la “federal” en el barrio de Villa Lugano. 
Enseguida se organizó una gran olla popular, y se espera la llegada de más muestras de solidaridad, para hacer “el aguante” a los trabajadores de Brukman, que han convocado para hoy a las 18 horas a un acto y conferencia de prensa en repudio a la represión, en la puerta de la empresa. 
Acompañemos a los trabajadores en lucha, demostrando nuestra solidaridad y que no están solos, que “si tocan a una, tocan a todas”, como dicen ellos. 
¡Todos a Brukman, hoy, a las 18 horas!

Pablo Kilberg
Domingo 24/11/2002