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Internacional

4 de diciembre del 2003

Construcción de la noticia
La dudosa leyenda de la soldado Lynch: ¿falta de rigor o montaje propagandístico?


aideka.tv

En su edición del miércoles 12 de noviembre de 2003, el periódico "El Mundo" llamaba la atención sobre el distinto tratamiento que se ha dado a los implicados en la emboscada en que fue hecha prisionera la soldado Lynch. "Nadie -dice El Mundo- recuerda los nombres de los 11 compañeros de la soldado Lynch que perdieron la vida. Tampoco se habla de Shoshana Jonson, quien también fue hecha prisionera y soportó un verdadero calvario. Hay quien sostiene que el que Shoshana fuera de piel oscura e inmigrante panameña jugó un papel determinante porque a los expertos en imagen no les debió parecer tan americana como la rubia Jessie".

¿Porqué la soldado Lynch se convirtió en una leyenda sin que ningún medio o periodista de los muchos que informaron de este hecho cuestionaran la veracidad de la información?

¿Porqué cuando se comenzó a dudar de la veracidad de estos hechos, los medios de comunicación no procedieron a su oportuna rectificación con el mismo énfasis con que habían construido una dudosa leyenda?.

La primera respuesta habría que buscarla en el hecho de que es prácticamente imposible conocer la verdad de lo que está sucediendo durante el periodo en que se desarrollan los conflictos bélicos.

Además, los periodistas que realizaron la cobertura de aquel conflicto estaban tremendamente limitados en su acceso a la información. Los informadores que fueron autorizados a "empotrarse" con las tropas aliadas tenían la oportunidad de asistir en directo al desarrollo del conflicto, pero su capacidad de contextualizar la información sobre la guerra era muy limitada, ya que solo recibían información desde el punto de vista excepcional de uno de los bandos.

En otra entrevista concedida a Aideka para el documental "LOS MEDIOS DE LA GUERRA", uno de los corresponsales de TVE en Irak, José A. Guardiola habla, precisamente de lo importante que es contrastar la fuente de la noticia, el llamado "factor humano" de la información. Un factor que se vió mermado en la Guerra de Irak.

Lo que ha ocurrido con la campaña mediática de la soldado Lynch es un ejemplo de como la maquinaria militar mediatiza la información veraz y anula o limita, en la práctica, la capacidad de los profesionales para investigar y contrastar las fuentes mientras se desarrolla el conflicto.

Sin embargo, cabe preguntarse como, una vez desvelados los primeros indicios de esta falsa historia, ningún medio de comunicación se apresuró a investigar las verdaderas motivaciones de este montaje militar y periodístico, y cabe preguntarse asimismo, porqué una historia sin contrastar fue tan fácilmente asumida y distribuida por todas las agencias de comunicación.

Creemos que es necesario hacerse estas preguntas para fomentar una actitud crítica entre los profesionales de la información que, de una u otra forma, se ven "enredados" en una espiral de información que ya viene mediatizada y en la que los titulares que proporcionan las grandes agencias acaban eclipsando los matices, tan necesarios para comprender la autentica realidad social de ciertos acontecimientos.

Muchos espectadores pensarán que no era tan difícil desplazar a un periodista después de la guerra al hospital donde se produjo el rescate, y haber recogido impresiones de médicos y pacientes para comprobar que la información aportada por las agencias de noticias se aproximaba a la verdad. El día 12/11/03 el diario El Mundo (2) y The Guardian (3) recogen algunas declaraciones de los médicos desmintiendo que la soldado fuera violada y que los soldados americanos tuvieran resistencia.

CONSTRUCCIÓN DE LA NOTICIA EN TV

Prácticamente, todos los medios de comunicación se hicieron eco de aquel suceso como una noticia heroica con final feliz. A título referencial, hemos observado las imágenes del rescate de la soldado Lynch emitidas por la emisora pública, TVE, durante la guerra en Irak así como la noticia emitida meses después -el sábado 10 de noviembre de 2003- en el TD1, una vez que la propia soldado Lynch había acusado al Pentágono de utilizar su captura y había desmentido la información emitida por las agencias de noticias durante la guerra. La información sobre el desmentido no fue reemitida sin embargo en la segunda edición del Telediario, es decir, no consiguió un eco equivalente al que había suscitado el "montaje propagandístico" del rescate.

CARACTERÍSTICAS DE LA EMISIÓN:

En el TD1, se combinaron imágenes que apoyaban la narración del texto con las imágenes difundidas por el Pentágono, las cuales mostraban como la soldado era portada en una camilla. Se ve el descenso de los soldados por unas escaleras, presuntamente del hospital donde había sido recluida y su posterior traslado a un helicóptero. La noticia terminaba diciendo "La soldado Lynch es una heroína que ha elevado la moral de un país en guerra".

Objetivo : Humanizar las tropas aliadas :

Es interesante observar como a continuación de la noticia sobre la soldado Lynch se emitió otra información sobre el rescate de una niña herida en combate por parte de las tropas aliadas y su acogida en un hospital británico. La emisión y el enfoque de estas dos noticias concatenadas provoca un efecto humanizador en el comportamiento de las tropas aliadas, en un momento crítico de la intervención armada.

S
iete meses después de la leyenda alimentada por el pentágono, la soldado Lynch denuncia que ha sido utilizada. Esta información es emitida por el TD1 de TVE el 10 de noviembre de 2003.

NORMAS DE ESTILO (1)

Hemos extraído las directrices de una de las emisoras de mayor prestigio por su tratamiento informativo, la BBC, en lo referente a imparcialidad, precisión y rectificación de aquellas informaciones cuya veracidad puede ser cuestionada, como fue el caso de la soldado Lynch.

En el apartado de valores, estándares y principios, hay un subapartado titulado: Imparcialidad y precisión.

La primera recomendación del subapartado de imparcialidad dice lo siguiente: "La debida imparcialidad es el corazón de la BBC. Es un valor básico y ningún área de programación debe quedar al margen. Todos los programas y servicios de la BBC deben mostrar amplitud de mente, justicia y respeto por la verdad."

En el apartado dedicado a hechos reales, como es el caso de la guerra en Irak, se puede leer: "Un programa basado en hechos reales que trate sobre temas conflictivos de interés público o controversias políticas o industriales cumplirá con su compromiso con la imparcialidad debida si es justo, riguroso y mantiene el respeto por la verdad."

En el subapartado dedicado a la precisión se lee como primer mandato: "La BBC ha de ser rigurosa. La preparación de todos los programas debe ser minuciosa. Tenemos que estar preparados para verificar concienzudamente y pedir consejo".

En el apartado 2, sobre como conseguir precisión recomienda "La fiabilidad de las informaciones de las agencias de noticias varía según la agencia, la oficina y el periodista. Es buena práctica no publicar una noticia de una agencia salvo si puede ser comprobada por un corresponsal de la BBC o por otra agencia."

El apartado 3 es sobre el tema que nos ocupa, rectificaciones de errores. En él se puede leer: "Cuando ocurre un error factual serio es importante admitirlo clara y francamente. Decir lo que se hizo mal, tanto como ponerlo correctamente, puede ser un elemento importante a la hora de hacer una rectificación efectiva."

A su vez, en el apartado 4, sobre precisión en el lenguaje se lee: "No basta con que los hechos sean exactos. Debemos utilizar el lenguaje justamente. Esto implica evitar la exageración. No debemos usarlo descuidadamente de modo que sugiera juicios de valor, compromisos o falta de objetividad."

En el apartado 6 sobre la reconstrucción de una noticia, las directrices de al BBC dicen: "Las reconstrucciones no deben sobredramatizar los hechos de modo sensacionalista o engañoso." y "...los programas de noticias normalmente no deben hacer reconstrucciones de hechos de actualidad."

Finalmente en el apartado 7, subapartado sobre escenificación y reescenificación de hechos se lee: "La audiencia no debe ser nunca confundida por lo que está viendo u oyendo en un programa. La utilización de la reconstrucción todos los hechos son explícitamente re- escenificados para la cámara o micrófono y cuando el equipo del programa no estuvo presente en ningún momento al ocurrir los hechos, es una técnica aparte y debe ser etiquetada como tal. Las tomas y secuencias nunca deben ser intercaladas para sugerir que ocurrieron al mismo tiempo si la yuxtaposición de material resultante conduce a una impresión de los hechos tergiversada y engañosa. "

OBSERVACIONES

Hay diversas directrices que, dadas las circunstancias en que se difundió esta noticia por parte del Pentágono, no fueron observadas por la mayoría de los medios de comunicación.

Una de ellas es la referida a la dramatización del asunto, con la inclusión narrada de un tiroteo contra soldados iraquíes que no estaban finalmente en el hospital y la superposición del rostro de dolor de la soldado.

Muchos informadores utilizaron expresiones que podrían considerarse exageradas, como por ejemplo la que utiliza el informador de TVE al referirse a una "operación de alto riesgo" o a que "Lynch es una heroína"

Al emitir el desmentido de la soldado Lynch, la mayoría de los medios utilizaron las imágenes de archivo del propio rescate que se convirtió en leyenda, sin advertir que fueron precisamente esas imágenes de las que se sirvió el Pentágono para caracterizar el montaje propagandístico.

Notas:

Información obtenida de:

(1)
http://www.aideka.tv/BBC/directrices2.html

(2)
http://www.elmundo.es/elmundo/2003/11/11/internacional/1068545272.html

(3)
http://www.guardian.co.uk/Iraq/Story/0,2763,1083110,00.html