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Argentina: La lucha continúa

2 de enero del 2003

6º Congreso Nacional de la CTA
Entre recuperar la iniciativa y superar contradicciones internas

Eduardo Lucita

El 14 y 15 del mes en curso tuvo lugar en Mar del Plata el nuevo Congreso de la CTA. Largamente preparado en los Congresos regionales y numerosas asambleas fue convocado en medio de una gran expectativa mediática.
En los prolegómenos se anunciaban unos 15.000 asistentes, se discutían los documentos alternativos al documento oficial, elaborados uno por la CTA-Capital(1), y despachos en minoría presentados en los congresos de Prov. de Bs.As. y Capital Federal y cobraba fuerza el lanzamiento de un movimiento político-social, que para la superficialidad periodística sería el esperado PT local y Víctor De Gennaro el Lula argentino.
Sin embargo el discurso inaugural dejaría en claro que no se trata de construir un partido como el petista brasileño (esto es con un perfil laborista), sino una fuerza política que contenga al 80% de la sociedad argentina.
En realidad esta propuesta de la dirección de la central es producto de la necesidad política de recuperar la iniciativa luego de la frustración del FRENAPO, la claudicación del 19 y 20D/01 y el giro a izquierda de parte de la sociedad. Pero también es expresión del enorme vacío político existente y la necesidad de una alternativa política capaz de cubrirlo y contener y darle perspectiva a un movimiento social en crecimiento pero que mantiene su fragmentación.
Una oposición organizada
Finalmente una nada despreciable cifra de 9000 asistentes, poco mas de 7000 delegados acreditados y numerosos invitados locales e internacionales, se dieron cita en el encuentro. Un dato diferenciador en relación a anteriores congresos, fue la emergencia de una oposición organizada, la "Corriente Sindical" que, con base en las seccionales del SUTEBA en Matanza y Gral. Rodrigues, en ATE-Sur y en numerosas agrupaciones del interior, logró reunir unos 600 delegados(2) y presentó un documento alternativo que pone el acento en la construcción de un sindicalismo de clase.
Esta realidad dio origen a los primeros debates alrededor del reglamento de funcionamiento del congreso. Lo que estaba en juego era la viabilidad del tratamiento de los despachos por minoría en el plenario general, finalmente el oficialismo logró imponer un piso del 25%, con lo que dada la relación de fuerzas resultaba casi imposible que estas posiciones pudieran salir de las comisiones e ingresaran al recinto mayor.
Este no es un dato menor al momento de medir fuerzas, porque al igual que en los Congresos de Capital y Prov. de Bs.As. la Federación de Tierra y Vivienda (FTV) desembarcó con una cantidad de delegados imposible de controlar dadas las características del movimiento piquetero. Y este es otro de los datos distintivos de este congreso, la FTV es prácticamente el único sector que ha crecido dentro de la CTA en los últimos años. Crece en número (3) y también avanza en hegemonizar las posiciones políticas.
Tres debates centrales
El congreso funcionó en base a 8 comisiones, todas multitudinarias y con numerosas intervenciones de los delegados, pero el peso de los debates se centró en tres de ellas: las de organización, de táctica y estrategia y la gremial.
Precisamente el avance de la FTV tuvo su prueba de fuego en la Comisión de Organización, allí se planteó, en oposición a la mayoría de la Mesa Nacional, que la FTV fuera la única representación territorial de la Central, con lo que se obligaría no solo a integrarse a los otros movimientos similares sino también a que estos se disuelvan en su seno perdiendo identidad y autonomía. Esta propuesta fue rechazada por la Corriente Sindical y otros sectores, no obstante pasó al plenario general.
En esta comisión distintos delegados plantearon también, sin mayor éxito, democratizar los estatutos de la central incluyendo la proporcionalidad de las representaciones y la revocatoria de mandatos entre otras claúsulas.
En la Comisión Gremial el debate tuvo dos ejes centrales. Por un lado la discusión acerca de un pliego general de reivindicaciones y una plan de lucha. Por el otro la propuesta de movilización a Plaza de Mayo para el 20 de diciembre, propuesta a la que se oponía la mayoría de la Mesa Nacional, pero a la que la CTA-capital condicionara declarando anticipadamente un paro con movilización para ese día.
No obstante las fuertes discrepancias la Comisión logró consensuar un despacho que incluía ambas propuestas y estas pasaron al plenario general.
Pero el debate principal se dio en la Comisión de Táctica y Estrategia. Allí la conducción nacional volcó todo su peso político para que se aprobara la constitución del Movimiento político-social-cultural.., y también el sector que responde a De Gennaro debió apelar a toda su capacidad de negociación para obtenerlo.
Porque es conocido que la CETERA es renuente -también con el FRENAPO- a este tipo de iniciativas y además porque la FTV condicionó su apoyo a que el plenario general aprobara su propuesta de representación territorial exclusiva. Por su parte la Corriente Sindical y otros sectores se opusieron sobre la base de que la propuesta no es mas que otra variante de centroizquierdismo.
Finalmente el Plenario General aprobó la creación del MPS; las propuestas contenidas en el pliego de reivindicaciones, una convocatoria a todas las plazas del país para el 20 de Diciembre(4) y la exclusividad de la representación territorial para la FTV.
En el tratamiento de esta última pudo verse cómo, bajo la presión de la dirección, dirigentes que se habían opuesto originalmente cambiaban rápidamente su voto. La propuesta tuvo una amplia oposición, que superó largamente a la que expresa la Corriente Sindical, lo que provocó el momento de mayor tensión en el congreso y obligó al Secretario General que lo presidía a llamar a una doble votación primero y luego a negarse al conteo de los votos. Esto hizo, en un hecho inédito, que la totalidad de los delegados de la Corriente Sindical, encabezados por los miembros del Movimiento Territorial de Liberación (MTL), se retiraran del congreso quemando sus credenciales.
Conclusión provisoria
Será necesario conocer los documentos finales del Congreso y ver los alcances de las resoluciones aprobadas –en principio pareciera ser que la referida a la exclusividad de la FTV fue relativizada- y cuales son los contenidos concretos del MPS, al que nadie definió ni se especifica, más allá de la convocatoria a todas las organizaciones populares, que clases y sectores sociales, aparte de los trabajadores, lo compondrían. Aunque no puede dejar de registrarse que en cierre del encuentro la dirigente de CETERA hizo referencia a la creación del MPS con un poema de León Felipe "Ni antes ni solos, juntos y a tiempo"... por lo que todo balance es provisorio.
Pero sí es posible suponer que aun recuperando cierta iniciativa la Central no sale fortalecida, en términos de homogenidad, de este congreso. Por el contrario todo parece indicar que las distintas tendencias y fracciones internas se consolidan y más allá del indudable y reconocido peso personal del Secretario General, la corriente que el expresa está seriamente condicionada.
No se trata solo de disputas intergremiales o de tendencias en gremios con serias fracturas internas, o cuyas direcciones están seriamente cuestionadas, sino de debates más profundos.
Por un lado la aparición de una corriente de izquierda que pone el acento en la relación capital-trabajo y en una perspectiva anticapitalista, que más allá de ser minoritaria y de la forma tradicional de intervención política de la militancia partidaria –sectaria/dogmática- sus posiciones tienen como sustento la naturaleza de la crisis del capital en Argentina.
Por el otro si bien las corrientes mayoritarias tiene un acuerdo básico, sustentado en una concepción nacionalista, de reformas integrables por el sistema, distribución del ingreso y recuperación del mercado interno, en su seno disputan posiciones aquellos que buscan una alianza con sectores de la burguesía nacional frente a los que reconocen la inexistencia de la burguesía nacional argentina como potencialidad política y ponen el acento en la acción del Estado.
Así la CTA enfrenta este nuevo período sometida a las tensiones de tener que retomar la iniciativa política, en momentos en que la lucha de clases se agudiza, y convivir con sus contradicciones internas.
Todo augura futuros y enriquecedores debates.
Buenos Aires, diciembre 2002
Notas
(1) El documento plantea una fuerte autocrítica por la actitud de la Central en los acontecimientos del 19 y 20 de diciembre del 2001; y avanza en definiciones de clase y anticapitalistas.
(2) Estos delegados se referencian mayoritariamente en la estructura sindical y territorial del PC, y en menor media en otras organizaciones de izquierda y militantes independientes.
(3) Este mayor peso de la FTV está sostenido por un lado por los altos índices de desocupación existentes que hace que crezcan todos los movimientos de trabajadores desocupados en el país, claro que la FTV se ha beneficiado con los acuerdos alcanzados con el Gobierno Nacional y la obtención de miles de planes de empleo transitorios que le han permitido en este año convertirse en una organización de alcance nacional. Pero por otro lado la CTA está estancada desde hace varios años en su inserción sindical, no ha logrado incorporar sectores industriales ni de gremios de servicios importantes. En este contexto el avance de la FTV es inevitable.
(4) Claro que llegado el 20 de diciembre una fue la actitud de las CTA - Capital y del interior y otra la de la CTA nacional y de la FTV.